Quiero que sepas que te quiero

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Obito dormía plácidamente y despertó con la voz de Kakashi.

- ¿No tienes nada de comida aquí?

- Nada -dijo Obito somnoliento-.

- Está bien, desayunare donde Kushina. Iré a conocer al hijo de Minato-sensei.

- Nos vemos. ¿Konan va contigo?

- Si.

Se fueron y Obito quedo solo, se ducho, se puso el uniforme de shinobi de Konoha, su parche en el ojo y salió.

Iba saliendo de casa y se disponía a ir a la oficina pero no quiso perder la oportunidad de pasar a ver a Kushina, subió la escalera y toco.

Konan le abrió la puerta y una ligera risa asomo en su cara, Obito en seguida se arrepintió de haber ido.

Naruto estaba sentado en el piso del living hablándole a Kakashi sentado frente a él y Kushina estaba sentada en uno de los sillones del living.

Obito saludo a todos, Naruto hablaba muchísimo como de costumbre.

- Creo que Naruto debería conocer a Sasuke -le dijo Obito a Kushina-. Son tan distintos que me da risa.

Ella sonrío.

- ¿Quién es Sasuke? -preguntó Naruto-.

- Es el hijo de un amigo mío, un Uchiha como yo. Es callado y mal genio, básicamente todo lo opuesto a ti.

Todos se rieron de ese comentario.

- ¿Quieres algo? -le dijo Kushina a Obito-.

- Aceptaría un té -sonrío él-.

Ella fue a prepararlo y Obito se sentó en el comedor. Kakashi y Konan seguían en el living con Naruto. 

Unos minutos después, Kushina apareció con el té y se sentó junto a Obito.

- Naruto está feliz, y creo que le agrada Kakashi.

Obito no contestaba, miraba la nada y tomaba su té, pensativo.

- ¿Qué pasa? -pregunto ella-.

- Tengo una pregunta -dijo él serio-. 

Kushina lo miro expectante.

- ¿Tú me ves como un niño?

- No -le sonrío ella-. Yo te veo como lo que eres y no eres un niño. ¿Por qué preguntas eso?

- ¿Alguna vez piensas en nosotros?

Ella lo miró confundida.

- Vamos, sabes de que hablo.

Kushina le sostuvo la mirada a Obito pero no fue capaz de decir nada.

Obito le tomo la mano y le dijo:

- Quiero que sepas que te quiero.

Quedaron mirándose, ella se puso roja y el también. 

De forma de no prorrogar esa agonía al cabo de unos treinta segundos tomados de la mano Obito se levanto, le dijo a sus compañeros que había mucho trabajo y se fueron de ahí.

Mientras caminaban los tres a la Torre del Hokage, Obito se separo un poco de Kakashi y le dijo a Konan en voz muy baja.

- Lo he hecho.

- ¿Qué cosa? -preguntó ella-.

- Le dije que la quiero.

Ella le sonrío.

Obito regresa a casa / Los viajes de Itachi UchihaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora