Epílogo

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—Me has traicionado—le gritó Chloe a Jackson mientras le pegaba en la cabeza.

—No te he traicionado—dijo Jackson intentando protegerse—. Hice lo correcto. Tenía que matarte.

—Pensaba que eras un tripulante...—dijo Chloe mientras se levantaba de la mesa del comedor y cerraba el portátil—. ERAS UN SUCIO IMPOSTOR.

—Concuerdo—dijo Theo desde el sofá. 

—Oh venga—soltó Jackson al ver que su novio no le apoyaba—. Es un juego.

—Para ti todo es un juego—dijo Thomas tumbado al lado de Theo.

—¿Por qué estáis todos contra mí?—se ofendió Jackson cruzándose de brazos—. Salvé tu vida hace un año rubia. ¿Así me lo pagas?

Chloe le enseño el dedo del medio y se fue a guardar su ordenador a su habitación. De camino a su habitación escuchó los gritos ofendidos de Jackson y cómo Thomas peleaba con él. Con una risita, Chloe dejó el ordenador encima de su cama y se miró al espejo una última vez.

Quedaba una hora para su proclamación como Gobernadora y llevaba más de mediodía vestida. Tenía el pelo recogido en un moño que apenas dejaba un pelo suelto. Su vestido era blanco con mangas y un enorme collar de perlas le decoraba el cuello. Miró sus brazos e hizo una mueca al ver unas pequeñas líneas blancas.

Las cicatrices de la lucha del año pasado no se habían curado del todo. Demasiadas heridas en un día. Aún así, no le importaban en aquel momento. Sólo le preocupaba desmayarse en el discurso.

—¿PERO QUE HACÉIS EN EL SOFÁ ASI?—gritó una voz femenina y Chloe corrió al comedor. Cuando llegó se encontró a Sofía cogida del brazo con Rose mientras les echaba la bronca a los chicos—. OS VAIS A ARRUGAR EL TRAJE. 

—Hugo levanta el culo del sofá ahora mismo—le gritó Rose al ver como su novio estaba panza abajo jugando con su móvil.

—Sí señora—dijo haciendo un saludo militar.

Chloe se acercó a las chicas y les sonrió. Rose llevaba un vestido negro ajustado que le remarcaba las curvas y Sofía llevaba un vestido amarillo holgado que le ocultaba su no muy hinchado vientre.

—Es la hora—dijo Howard entrando en el apartamento. Llevaba su traje elegante de siempre y miró a todos los chicos—. ¿Listos?

Todos asintieron y se fueron yendo del apartamento de uno en uno. Jackson y Thomas le ofrecieron cada uno un brazo y Chloe, temblando, los cogió y fueron juntos hacia el ascensor. Llegaron hasta la planta baja y todos menos Chloe y Howard salieron al exterior.

Chloe casi vomitó al escuchar al montón de gente que había detrás de esas puertas. Un pequeño escenario había sido colocado enfrente de la puerta con un atril con un micrófono. Chloe empezó a temblar y le cogió la mano a su padre.  Al cogerla, miró extraño a su padre y se dio cuenta de que estaba sudando.

—¿Papa, estás bien?

—Mi niña crece—dijo casi entre lágrimas.

—Papa, queda un mes para la boda.

Howard empezó a llorar y Chloe rodó los ojos. Sin embargo, sonrió y miró el anillo de diamantes que había en su mano.

—Ya es la hora—dijo un hombre con un pinganillo y los guardias abrieron la puerta. Chloe y Howard avanzaron hasta llegar enfrente del atril. El público empezó a llamar a gritos a Chloe, la cual saludó con la mano con una sonrisa.

Una vez finalizaron los gritos, Chloe se colocó justo enfrente del atril y encendió el micrófono. Respiró varias veces y miró al público: humanos, vampiros, magos, hombros lobo, sus amigos en un escenario pequeño especial, Jackson alzando un cartel de "I Love U"...

¿Jackson con un cartel?

Chloe quiso rodar los ojos pero se recordó a si misma que había multitud de cámaras mirándola. En vez de eso, tosió y empezó a hablar:

—Hoy es un día especial—dijo Chloe—. Hoy es el día en el que tomo posesión del cargo que ha pasado de generación en generación en mi familia. Es un honor para mí, poder ser para vosotros un referente y una guía. Hemos sufrido mucho estos años. Sufrimos perdidas, sufrimos dolor. Pero ganamos mucho. Ganamos un nuevo mundo—fijó su vista en los ciudadanos del otro continente que habían asistido—. Ganamos nuevos amigos—fijó su vista en Rose que le dio una amplia sonrisa—. Ganamos nueva familia—fijó su vista en Sofía y Dylan—. Y ganamos muchos kilos con la fiesta de después.

Esa frase provocó las risas de varias personas. Chloe juró escuchar un "TU CULO ES GORDO" por parte de Jackson y cuando fijó su vista en él, Hugo tenía la mano en su boca. Hugo le guiñó un ojo y Chloe prosiguió:

—He perdido muchos hermanos durante esta batalla. A todos y cada uno de ellos los amé con todo mi corazón. Por eso es mi deseo que las tensiones entre razas acaben. Amé a mis hermanos y los honraré hasta el día de mi muerte. Amé a mi madre y seguirá conmigo siempre. Amo a mi padre y quiero que sepa que siempre seré su niña pequeña—Chloe escuchó un lloró detrás de ella—. Y quiero que sepáis que os amo a todos vosotros porque para mí sois mi familia.

El público aplaudió y Chloe les dedicó una sonrisa. Sus amigos se levantaron para aplaudir y Chloe los miró. Ahí estaba su familia. Chloe miró hacia atrás y vio a su padre, tío y abuelo. Sonrió y su padre se colocó a su lado.

—¿Juras proteger a este continente con tu vida?—preguntó su padre con una capa enorme en sus manos.

—Lo juro—dijo Chloe.

—¿Juras servir a este reino y jamás traicionarlo?

—Lo juro.

—¿Juras ser honesta con tu pueblo y hacer lo mejor?

—Lo juro.

—Entonces es un honor para mí, Chloe Ackman, nombrarte Gobernadora.

Howard le puso la capa a su hija lentamente. Era roja y muy bonita. Chloe cerró los ojos y dejó que su padre le abrochara la capa por delante. Una vez terminó le dio un abrazo y el público estalló en aplausos.

Ahora ella era la Gobernadora. Había ganado y había perdido. Ahora todo depende de ella...

La ceremonia acabo y sus amigos se acercaron para abrazarla. Chloe los abrazó y una vez estuvieron dentro del Palace, Chloe se quitó la capa y empezó a pegarle a Jackson.

—¿COMO QUE CULO GORDO?—gritó mientras le pegaba.

—Oye a tu consejero no se le pega—dijo escondiéndose detrás de su novio. Chloe rodó los ojos y Jackson la abrazó—. Oye tenemos que planear tu despedida de soltera.

—¿Mi despedida de soltera?—preguntó Chloe.

—Sí—dijo Rose—. Ya sabes. Strippers.

—Me apuntó—dijo Jackson levantando la mano.

—Jackson sólo habrá chicos ligeros de ropa—dijo Theo celoso.

—Ya lo sé—respondió con una sonrisa—. ¿Por qué crees que quiero ir?



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¡Hola! Hasta aquí la historia de nuestra querida Chloe. Muchas gracias por todo el apoyo que ha recibido tanto este libro como el primero. Ha sido un honor escribirlo y que os haya gustado tanto. Muchas gracias por todos los votos y comentarios. Aún así estad atentos... quizás haya extras uwu.

Os deseo todo lo mejor de todo corazón. Nos veremos en otras historias si queréis. 

Un abrazo.





La GobernadoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora