Capitulo 8

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La observo como un maldito acosador sin vergüenza como los últimos días.

Remi la abraza como si un mismisimo ángel estuviese en sus brazos.

Nada más lejos de la realidad.

Maldita cazadora.

Cuando ambos se separan y ella habla, una enorme sonrisa rompe su rostro por la mitad.

Hago una mueca de desagrado.

¿Por que tiene que sonreírle de esa manera?

Pero entonces, la cazadora me divisa y su sonrisa muere.

Hago otra mueca interna,  esta vez por un motivo diferente.

Mierda.

Cuando ambos entran en la cabaña, comienzo mi día junto a mis hombres.

Por más que intento concentrarme,  mis pensamientos están donde no deben.

Mis hombres al ver mi negro humor, deciden dar por concluido el entrenamiento.

Paso la tarde y parte de la noche en el oceano, tratando de acomodar mis pensamientos . Cuando salgo decido buscar las respuestas que necesito.

Necesito zanjar de una vez esté asunto.

La cazadora no puede ser quien Remi y todos creen. Porque si, la muy astuta se ha ganado el cariño de muchas personas más, por lo que pude observar.

Es posible que cuando obtenga las respuestas que necesito, su vida ya no sera perdonada. Es simplemente imposible.

Jamás estaré en paz con ella en nuestro reino.

Por más dolor que Remi sienta,  será lo mejor.

El viejo es demasiado confiado.

Cosas de la edad.

Cuando nuevamente mi ropa esta sobre mi cuerpo,  me dirijo hacia la villa.

Los sigo a los cuatro hasta la cantina de Ever .

Remi va junto a Tara y sonríen mientras hablan.

La busco y la encuentro junto a Mako.

Por supuesto.

Jodido niño colorado.

Como lo detesto.

Rechino los dientes cuando escucho la risa de mi mascota cuando Mako le habla al oído.

Los cuatro entran en la cantina y espero.

Me recuesto sobre un pino y luego de dos horas pienso seriamente en entrar a por ella y llevarla a rastras hasta el lago y hundirla hasta obtener las respuestas que tan desesperadamente necesito.

Mis pensamientos son escuchados, porque ella sale por la puerta y se dirige hacia el lago.

Sola.

Esta mujer es tonta.

Avanzo suavemente y la observo apoyar su pequeño cuerpo contra un árbol y cerrar los ojos.

-Te diviertes, Haustier?

Su cabello es tan oscuro que no lo notaria en la oscuridad si no fuese porque soy un inmortal.

Ella abre los ojos cuando nota mi presencia.

Mmm.

Me coloco frente a ella.

Solo unos centímetros nos separan, mis pulmones se cierran cuando huelo su esencia.

La Caricia Del Vampiro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora