Es muy tarde (KOOKMIN)

PARTE I

Advertencia: En esta historia se hará mención de temas relacionados a abusos, traumas y violencia familiar. Leer teniendo esto en cuenta. Será una historia corta. 

PARTE I:

Claro, todo había resultado muy fácil.

Él era el único omega de su familia y era macho. Su padre se sentía muy avergonzado por ello y en cuanto tuvo la oportunidad de deshacerse de él, lo hizo. Lo había regalado como si fuera cualquier cosa a personas desconocidas. Estos se lo habían llevado de inmediato entre risas y burlas. Jimin estaba agradecido de que esos hombres mayores no le hubieran hecho daño, pero ese alivio había desaparecido casi de inmediato cuando lo entregaron a quien sería su alfa: un hombre alto, corpulento y guapo. Este no había dudado en marcarlo. Esa misma noche lo había poseído y marcado a su antojo obligándolo a permanecer a su lado para siempre.

De eso ya habían pasado 4 años. Ahora Jimin tenía 16 años y era mamá de 5 niños: Jungmin, Eunsoo, Jiwhan, Eunwoo y el cachorrito que en ese momento estaba trayendo al mundo.

Jimin estaba asustado, más bien: aterrado. Había tenido una discusión con su alfa porque no tenían dinero para comer y los malhechores que lo perseguían habían venido a cobrarles y amenazado con llevarse a sus bebés si el alfa no les pagaba antes del fin de semana. Jimin le había rogado a su alfa que lo solucionara, que por favor hiciera algo porque sus bebés estaban asustados; pero entonces el alfa lo había golpeado colérico y Jimin había roto fuente. Al alfa no le había importado realmente. Se había marchado ignorando los gritos de ayuda de su omega. Con las pocas fuerzas que tenía, sin embargo, el niño omega había alistado a sus 4 cachorritos y se había casi arrastrado al hospital más cercano donde había llorado por socorro, porque cuidaran a sus bebés mientras él daba a luz.

"Es una niña"

Había anunciado el doctor que lo había atendido.

¿Una niña?

Con las pocas fuerzas que le quedaban, Jimin había sostenido a su bebita resguardándola en su pecho. La cachorra había dejado de llorar al sentir la calidez de su madre.

"Jinah"

Había susurrado el pequeño omega con lágrimas en los ojos. Quizá... esos bebés habían llegado al mundo no con amor... no habían sido creados con amor, no. Cada uno de sus bebés eran el resultado de los abusos de su alfa. Pero aun así... pese al dolor... Jimin amaba a sus cachorros.

Tan solo unas horas después de dar a luz, Jimin había sido trasladado a una habitación compartida con otros omegas también en maternidad. Jimin tenía a su bebita en brazos y la observaba con curiosidad. Cada uno de sus cachorritos era particularmente precioso.

-¿Omma...?

Jimin había levantado la vista y se había encontrado con sus 4 cachorros en la cama con él. Eunwoo, de 2 añitos, estaba dormidito en un rincón; Jiwhan de 3 años chupaba su dedo pulgar distraídamente; Eunsoo de tan solo 10 meses dormía en los brazos de Jungmin, su cachorrito mayor de 4 años.

-Dime...

Jimin esperó a que Jungmin hablara. De todos los bebés, Jungmin era el que más se parecía a su padre.

-Jiwhan tiene hambre...-susurró el niño.-¿Qué hacemos...?

Jimin suspiró. A parte de ser el más parecido a su padre era el más maduro y consciente. Ayudaba a su madre con sus hermanitos cuidándolos y distrayéndolos para que no se percataran de la violencia con la que su padre trataba a su mamá aun estando este embarazado.

-No lo sé... -Respondió el pequeño omega.-No tengo dinero...

Jungmin suspiró.

-¿Puedes cuidar a Eunsoo? Voy a ir a buscar...