Aquella mañana, el pequeño omega había amanecido solo en esa gran habitación que ahora era suya. Luego del altercado en la laguna, cada uno había vuelto por su lado. No se dirigieron la palabra en adelante. Jimin fue a secarse y cambiarse, y luego se llevó a sus bebés mientras el alfa desaparecía en uno de los pasadizos de la gran casa. A Jimin ya no le importó. O, bueno, trató de aparentar que no. Pero lo cierto era que su lobo estuvo inquieto toda la noche haciéndolo despertar cada tanto y tratando de despertar su conexión y enviarle algún mensaje al hombre. Jimin no podía entender qué le pasaba a su lobo, cómo es que había caído por alguien que les había hecho tanto daño. Pero su lobito era terco. Siempre movía la cola cuando veía aparecer al alfa y soltaba feromonas para llamar su atención. Se derretía cuando este lo tocaba y aullaba contento cuando el alfa lo besaba o lo tomaba de la mano de repente. ¿Estaba loco? Era como si realmente no pudiera vivir sin él.
Y cuando a Jimin le venía el celo, su lobo se ponía insoportable. Quería ser mimado y follado hasta la saciedad. Jimin no podía recordar mucho de esos días porque su lobo lo poseía por completo, pero imaginaba que su lobito lograba su cometido porque cada vez que despertaba del celo tenía mordidas y marcas por todo el cuerpo; así como de ello resultaron Jihwa, Eunwoo y Eunsoo. Jungmin y Jinah eran otra historia.
-Solo quieres que te quieran, ¿verdad?
Susurró mientras se abrazaba a sí mismo bajo las sábanas. No quería llorar, pero siempre se sentía tan al límite de todo. Siempre se sentía tan adolorido y rechazado. Tan mal consigo mismo. Y eso le asustaba tanto porque se sentía inútil y mala persona, porque no podía controlar sus emociones y tenía a cargo a cachorros tan pequeños que lo observaban y copiarian sus actitudes. Jimin quería poder ser una buena mamá, pero generalmente sentía que era de lo peor y les pedía perdón a sus cachorros por ser él su mamá y no alguien mejor. Alguien de quien no se avergonzaran cuando crecieran, porque Jimin ya lo tenía por hecho. Esos niños algún día empezarían a preguntarse por qué los tuvo siendo tan joven, por qué no sabía leer o escribir, por qué no había ido a la escuela. Esos niños algún día sabrían la verdad y entonces Jimin no sabía qué haría.
Tenía miedo. Miedo de que lo que más amaba en este mundo y lo que lo aferraba a este mundo lo rechazara también como todo y todos habían hecho hasta ahora desde que era un niño pequeño.
Una hora después, Jimin despertó por el llanto de Jinah y Eunsoo, los cuales parecían haberse puesto de acuerdo para reclamar su alimento en conjunto. El pequeño omega con algo de pereza se levantó y fue a atender a los bebés. Primero alimentó a Jinah, la cual parecía muerta de hambre por la fuerza y desesperación con la cual se aferró al pecho de su madre. Luego, se encargó de Eunsoo, el cual además de leche lo que quería era que le cambiaran el pañal. Mientras se encargaba de su cachorrito se percató de que realmente esos señores se habían encargado de absolutamente todo pues en la habitación había desde juguetes a cajas de pañales, ropa, zapatos; y la decoración era simplemente preciosa. Parecía un castillo.
Jimin, con Eunsoo aún en brazos pues el bebé no quiso volver a dormirse a diferencia de Jinah, fue a la habitación donde dormían los otros tres cachorros y los fue despertando uno a uno. Los niños abrieron los ojos perezosamente y Jihwa trató de aferrarse a la cama, pero entonces Jimin le dijo que le daría un poco de pizza si lo obedecía y el cachorrito estuvo de pie de inmediato a lado de su mamá. Hacía mucho que los bebés no dormían en su forma humana, pero ese día había sido la excepción y Jimin consideraba que debería ser así en adelante. Después de todo, ahora ya tenían camas propias y no debían dormir todos apretujados en una canasta.
-Omma, ¿pisha?-Preguntó Eunwoo mientras se cogía del pantalón de su mamá para bajar las escaleras con pasos tímidos.
-Primero vas a desayunar y luego vemos, ¿de acuerdo?-Le contestó Jimin mientras tomaba su manita y lo ayudaba a bajar los escalones pacientemente.

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Es muy tarde (KOOKMIN)
FanfictionLuego de haber sido regalado por su padre por haber nacido omega, Jimin termina siendo emparejado a la fuerza con un alfa del que no sabe nada. Una marca en su cuello y sus cachorros lo obligan a permanecer por siempre a su lado. ¿Podrá alguna vez...