Wax Masks | JiChen [cancelada]

Capítulo XV.

L

as luces color amarillo hacían resaltar la calidez del lugar, algo increíble como después de unos meses en guerra las personas mantenían esa armonía.

«Es algo completamente normal» Se dijo Chenle a sí mismo.

Los tronos de la realeza estaban en una tarima de madera, resaltaban por el oro del que eran hechos. Los habitantes los miraban de vez en cuando, hablaban e iban de un lugar a otro compartiendo felizmente, los niños jugaban persiguiéndose o a las escondidas. Habían otros tres tronos, dos en una tarima y uno solo en la otra; en la primera habían dos chicos de unos veinticinco años; en la segunda había un hombre completamente solo. Eran reyes, pero ChenLe no sabía de qué.

Había acompañado a Jeno, Jaemin y Renjun para arreglarse en la tarde antes de volver al castillo.

Eligió un conjunto casi negro en su totalidad; una camisa negra manga corta de cuello medio-alto, suéter verde militar, unos pantalones negros medianamente ajustados, con botas marrón oscuro. Cambiarían esa noche, pero él no lo tenía planeado.

—Tu estilo de vestir es... Impresionante —Dijo Renjun mirándolo de arriba a abajo.

ChenLe lo miró de reojo alzando una ceja.

—¿Por qué lo dices? De donde yo vengo es básico, toda persona saldría así.

—Aquí se suelen usar ropas algo más sueltas si no estás en el trabajo, sin nada de cuero o muy llamativo como botas puntiagudas.

—Se están poniendo de moda, Renjunie —Dijo Jeno, el que sabía más acerca de “moda” que sus novios—. Seguramente cuando entres a una tienda vas a ver bastantes.

—No entiendo cómo pueden se tan populares. ¿Una moda tan rara? Parecen duendes.

Jaemin sonrió.

—Si, aunque a mí me gusta... Voy a comprarme unas.

El Omega lo miró con ojos abiertos.

—Ni se te ocurra... Pero a tí te quedan bien, ChenLe.

—Lo tomaré como un cumplido —Dijo el contrario.

Las Reinas y el príncipe llegaron al gran salón, la Reina Seulgi pasó primero posicionándose a la derecha, La Reina Joohyun pasó detrás de ella, JiSung se detuvo mirando detrás y adelante de su madre alfa disimuladamente. La Reina Seulgi hizo una ligera seña con la mano, permitiéndole pasar frente de ella.

La Reina alzó su copa hecha de plata y vidrio, estaba servida a la mitad de vino blanco y con un pequeño utensilio de plata la sonó delicadamente. El hombre de traje abajo de la tarima arregló su traje y tocó una bocina.

—La Reina Seulgi, monarca del Reino Noroeste dará un discurso. Se les ordena mantener silencio.

Los ciudadanos obedecieron la orden, mirando a la Reina levantarse de su trono y posicionarse en frente a este, justo en el medio de la tarima.

—En mi calidad de Reina y Presidenta del Reino Noroeste, me es grato dar a todos los ciudadanos y ciudadanas; omegas, betas y alfas, la bienvenida al Castillo de LongEon. Siempre he estado orgullosa de mi colaboracion con la Competencia Anual de Dé Reinos, y como jefe de la Mancomunidad Noroeste, me enorgullece y complace particularmente ver representadas aquí a Sociedades Internacionales cercanas de la Mancomunidad como Reino Sur y Reino Oeste. —Los reyes alzaron sus copas, haciendo ¿Orejas? a la Reina—. A lo largo de los siglos, sucesivas generaciones han sostenido que los cambios ocurridos durante su vida habian sido más espectaculares que nunca. Siempre ha sido así, pero no cabe duda de que en el curso de nuestra vida, una revolución en el campo de la guerra nos ha permitido ver de manera demasiado vivida la escala del sufrimiento
padecido por las victimas de distintos atentados por estos juegos y otros motivados por el hombre, en el mundo entero para luchar por nuestra unión y protegernos...