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Su corazón se aceleró de manera notable, casi parecía salirse de su pecho, más no se dejó conmover, ella era la dueña de su destino, y con su manipuladora manera de hablar estaría bien.

Por lo menos por ahora.


—¿Que mierdas estas diciendo? —dijo de forma más calmando, analizando cómo el tenso ambiente, y las miradas postradas en su ser no dejaban de tensarse.

—Sólo estoy abriéndole los ojos, a estos crédulos. —dijo taeHyung de forma agridulce— A estos sodomitas que vieron al anticristo en ti.


Y las miradas se volvieron aún más pesadas.


—¡¿Que mierdas Yoon?! —dijo Jin, expresando su enojo.

—¿Por qué? —se le resbaló la palabra a Kook, sintiendo como su corazón se hacía pequeño.

Pero no era comparado con el mar de emociones que sentía HoSeok en ese momento, estaba tan triste, y a la vez enojado.

— No soy su anticristo —se resignó cayendo en la mentira, y le penetró con la mirada— Aquí los ángeles malditos son ellos.... Bueno, casi todos.

Y miró a HoSeok, él cual no sabía bien el porqué, pero derramaba lágrimas como si la vida se le fuese en ello.

—Ho...

Fue lo único que alcanzó a decir antes de que este saliera corriendo sin un rumbo fijo.

–¡Ya viste lo que has hecho?! —reclamó TaeHyung, intentado salir pero siendo detenido por Yoon.

—No! El que hizo mierda todo eres tu. — y ella fue la que tomó rumbo por donde había visto el chico irse.



[🦋]



Llegó a la parte del convento en donde se hacían cosas en arcilla, imágenes y demás, y el estaba ahí, destrozado, fundido en un mar de lágrimas hecho bolita en un rincón e intentando tararear una canción de cuna para calmarse.

—Hobi... Yo... Yo puedo explicarlo.

— Vete! —se exaltó, intentando sacarle de ese vacío lugar, más sin mirarla directamente— No tienes porque explicarme nada!

—Claro que tengo. Ho, yo te...

—¡No lo digas! —gritó —¡Ya no quiero que me mientas!. ¡Por tu culpa estoy condenado!. ¡Por tu culpa serví al demonio!.¡Por tu maldita culpa ahora soy siervo del anticristo!

Soy tu siervo.


Y el silencio inundó todo, el tenía razón, le había mentido, lo había usado, y no sólo a él, sino que también a Jin, JungKook, y JiMin.


—Hobi , tienes razón. Yo solo caí en sus tentaciones, así como tu caíste en la mía así como yo caí en la tuya.

—¡Mierda Yoon! —volvió a gritar, esta vez más rencoroso— Deja de decir eso, mi alma fue débil, fui frágil e incluso traicione a mi señor, por darte devoción a ti. ¿Sabes por qué? Porque me enamoré, no de una chica inexistente, sino de ti, de YoonGi, el chico que me hizo ver que el sentir algo más que el cariño, no debería ser pecado, y aun así mirate. Tan engañoso, tan dulce, tan condenante.

Y no resistió más, lo besó de la manera más sublime del mundo, poniendo ambas manos en su rostro y secando de a poco sus lágrimas, demostrándole honestidad y miles de sentimientos , y aun así no fue suficiente.

—¿Quien eres tú? –le empujó HoSeok.

—Soy YoonGi, el ser que más te ama en este mundo  —dijo sintiendo como también se le caían te a pocos las lágrimas, viendo que HoSeok le miraba inexpresivo, confundido, iracundo y triste.

—Lo odio. Pero, no eres el chico del cual me enamoré.



[🦋]


Faltan un capítulo y el epílogo, así que esta obra ya termina a su fin uwu

Espero que les haya gustado, besos ♥️

El Convento - YoonseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora