Huir

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Los pulmones te ardían, sentías las piernas gritando por un descanso y el corazón estabas segura te iba a dejar de latir en un momento a otro por la intensidad con la que latía dentro de ti.

Toji a tu lado estaba peor, mucho peor, con heridas y sangre en todo su cuerpo. Ni siquiera se recargaba contra los árboles para tratar de no dejar un rastro que pudieran seguir.

Te habia dicho que bajaras lo mas posible tu energia maldita, que te trataras de ocultar para que no te siguieran. Para que no los siguieran, pues no se habia separado de ti ni un metro.

No pararon hasta que salieron de territorio Zenin, y aun asi siguieron adelante sin detenerse.

Cuando cruzaron los últimos metros fuera de las tierras de Naobito sentirse el alma regresar a tu cuerpo, si bien aun podían ingeniárselas para encontrarlos no lo podían hacer tal cual.

No podias ubicarte tan bien en donde estaban , habían huido por horas, Toji guiándote mientras sentías que eran la presa d aun depredador enorme.

Encontraron una pequeña vaciá, seguramente de quien cuidaba los campos que tambien se vean abandonados. Pasto verde habia crecido y solo habia algunas herramientas junto a la entrada y barandas en donde fueron campos de cultivo.

Abrieron la puerta que crujió un poco, el lugar aunque con polvo estaba bastante habitable. Toji se recargo por fin contra una de las paredes mientras quitaba la mano de su costado, esta estaba empata en sangre.

Lentamente se dejo caer resbalando por la pared hasta que sus piernas no cedieron mas y callo al suelo los últimos centímetros de forma pesada.

- Tenemos que parar la sangre- le dices hincándote a su lado-

Una mano ensangrentada va a tu mejilla que esta inflamada, quitando un mechón que habia ahi.

- ¿Quien....? - te pregunta-

- Toji eso no importa ahorita....-le dices intentando ponerte de pie-

- ¿Quien fue? - te dice con ojos verdes mirándote fijamente-

Sueltas aire de  forma cansada, estas tan cansada.

Mientras estas hincada frente a él comienzas a sentir el dolor en tu cuerpo, tu mejilla te arde y sabes que debe de estarce comenzando a ponerse morada por el moretón del golpe. Los brazos y abdomen te duelen por la forma en la que te movieron y tomaron con fuerza.

- Naoya.....

La quijada de Toji se aprieta. Lo ultimo que querías era ponerlo en contra de su familia, que esto pasara, seguramente era algo que él queria evitar y tambien por eso habia roto contigo.

Te pones de pie lentamente mientras tratas de buscar algo para vendarle la herida. Esto a sido tu culpa, Toji por eso te dejo y ahora le haz arruinado la vida por completo. Sientes lagrimitas en tus ojos que tratas de controlar mientras caminas buscando el sanitario de la cabaña.

Al encontrarlo abres en donde esta el anaquel y encuentras un botiquín que tiene una capa de polvo. Lo abres y por suerte el interior esta intacto, hay vendas y lo necesario. No te fías de las pomadas y su caducidad pero las vendas funcionarían.

Regresas a su lado y le enseñas las vendas. Toji levanta un poco su camisa en silencio, ves los músculos tensarse por el dolor.

Ni siquiera hay agua para limpiar la herida pero por el momento lo importante es cubrir la herida. Poner la Gaza y la pasas alrededor de su abdomen, acercándote a él en el proceso y sintiendo la punzada de tu corazón acelerado.

- Lo siento - le dices con voz baja cuando tus dedos trémulos terminan de anudar la venda -

- Kamui......- te llama -

Kamui  | Toji Fushiguro x LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora