Camilo Madrigal x Tú "Eres la luz de mi vela mágica"

Capítulo 51

Camilo correspondió a mi beso, el beso fue largo y mágico, en el proceso me sentía en las nubes.

Desearía estar así por toda la eternidad pero... Ambos terminamos separándonos del beso, haciendo contacto visual al igual que nos sonreímos mutuamente.

Sentí un millón de mariposas en mi cuerpo, especialmente cuando escuché su dulce voz.

Camilo:  ⎯ Eso quiere decir que... ¿Sientes lo mismo por mí?  ⎯

T/n:  ⎯ Si un beso no fue suficiente para aclarar las cosas, puedo darte otro.~  ⎯

Lo dije algo colorada pero menos nerviosa que las anteriores veces, me encontraba más en confianza.

Además de que hablé del mismo tono encantador con el que él me había hablado con anterioridad.
Esta vez fue Camilo quien se puso nervioso y sonrojado con mis palabras, pero no lo demostraba tanto a pesar de que sus mejillas rojas lo delataban.

Camilo: ⎯ Me encantaría.~ ⎯

T/n: ⎯Yo también te amo.~ ⎯

Ambos nos soltamos de las manos, yo lo abracé por el cuello y él me abrazó por la cintura, nos dimos un beso de nuevo.

Sus labios eran tan suaves, no quería separarme de nuevo.

Pero tuvimos que hacerlo.

Después de mirarnos de nuevo a los ojos, todo terminó en un cálido abrazo.

Camilo: ⎯ T/n... ⎯

T/n: ⎯ ¿Sí? ⎯

Camilo: ⎯ ¿Quieres... ser mi n-novia? ⎯

Su pregunta hizo que me emocionara al instante, mi felicidad era imposible de ocultar, di unos pequeños saltos de emoción mientras respondía:

T/n: ⎯ ¡Claro que si! ⎯

Rápidamente me lancé a sus brazos, él correspondió a mi abrazo, duramos un pequeño rato así hasta que escuchamos la puerta de su habitación abrirse y por instinto nos separamos a pesar de que no estuviéramos haciendo nada malo.

Antonio: ⎯ ¡Camilo! Mamá dice que... ⎯

Antonio se quedó quieto al vernos a ambos tan cerca, posó su mirada sobre Camilo, después pasó su mirada hacia mí, luego a Camilo y así sucesivamente varias veces mientras una sonrisa se forjaba en su pequeño rostro.

Después vimos una mano colocarse en el hombro de Toñito.

Mirabel:  ⎯ ¡Toñito! ¡Hay un pequeño animal indefenso que necesita tu ayuda!  ⎯

Antonio:  ⎯ ¿Dónde? ¿¡Se encuentra bien?!  ⎯

Mirabel:  ⎯ ¡Ven!, ¡Te cuento en el camino!  ⎯

Mientras se llevaba a Antonio de la mano, Mirabel con una sonrisa lanzó un guiño hacía nosotros dos. Camilo y yo le sonreímos a la par que nos miramos mutuamente.

Camilo:  ⎯ Y ahora... ¿Qué te gustaría hacer, novia?  ⎯

Oficialmente era la novia de Camilo Madrigal, esto era como un sueño hecho realidad, un sueño del cual nunca quiero despertar.