Beautiful flower © JJK | KTH (Borrador)

𔓘Clases de piano/afortunado

Hace unos días me había inscrito a unas clases de piano como actividad extracurricular, más que todo, era para reforzar algunas cosas que ya creía perdidas, además de probar con algunos otros instrumentos.

Para tomar las clases tenía que quedarme hasta que la mayoría de los alumnos se hayan ido a su casa y de ahí encaminarme al salón de música que es justo lo que estoy haciendo.

Al principio solo está el profesor a quién saludo, me siento y luego de unos minutos
... ¡Una aparición! ¡Un ángel! ¡Dios!

Kim TaeHyung camina con grandilocuencia, con pasos elegantes y firmes y se sienta a mi lado. Nunca había sentido a mi corazón latir tan rápido, estoy seguro que mis mejillas han tomado un color escarlata.

Me siento tranquilo ante su presencia, pero intranquilo a la vez. Tan contradictorio.

Siento temblar mis piernas cuando escucho su voz.
—Hola, mi nombre es Kim TaeHyung, soy nuevo aquí así que espero podamos llevarnos bien —Sonrie y ese acto hace que quiera llorar, ver su rostro de tan cerca dolía como nadie podría imaginar.

—S-Soy Jungkook, mucho gusto.

Los demás alumnos llegan y la clase comienza, TaeHyung tenía un talento innato para el piano, era perfecto y no podía evitar quedarme embelesado ante su excelencia.

Lo ayude con algunas notas, algunos ejercicios para que practicará y una pequeña y fácil canción para que tocara, fue simplemente divina la manera en la que sus dedos recorrian delicadamente el piano, con tanta suavidad como si fuera frágil. Las notas salían de manera dulce y armónica, no había fallado casi ninguna vez. TaeHyung era un ser fenomenal.

—¿Que tal lo hice, Jungkook? —dijo parando de tocar y tuve que abrir mis ojos para apreciarlo, juro que salían corazones de todo mi ser al verlo. Su rostro era tan tierno, quería tocarlo.

—Magnífico —Él rio avergonzado—. Es cierto, tienes un gran dominio con el piano apesar de que no lo has tocado mucho como me dijiste, casi no has fallado en las notas. Escucharte tocar fue muy placentero. Si sigues, serás un gran pianista.

—Me alegra que te haya gustado, me gusta tocar varios instrumentos y ahora quise probar con el piano. Seguiré practicando.

—¡Si! Tus manos... Fueron hechas para tocar cosas preciosas, son perfectas para cualquier instrumento. En especial, para el piano, tienes manos de pianista.

El impulso de tocar sus manos se me va por completo al verlo pararse.

—¡Dios! Se me hace tarde, disculpa. Tengo que irme, nos vemos la siguiente clase, Jungkook. Muchas gracias por todo.

Una vez se va puedo gritar en silencio y escondo mi cara en mis manos ocultando la sonrisa triunfante que se posaba en mis labios, tengo que sentarme porque la impresión en gigante y la euforia no hace reaccionar mis pies.

¡El mejor día de mi vida!

Hablé con Kim TaeHyung, el amor de mi vida, la razón de mi existencia, el lucero en la mañana, el ángel, mi flor, mi oso, mi todo.

Nadie podría quitarme la dicha de haberlo tenido cerca y que lo vería por varios días más.

Estoy seguro y puedo apostar que no hay ser más afortunado que yo.

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“Serendipia, hace tiempo busque esa palabra en el diccionario por una tarea y descubrí que te describía bien, al menos la situación.

Kim Taehyung, eres algo bueno que no estaba buscando, te encontré solo por mera casualidad y no he podido quitarte de mi mente y poco a poco has ido apoderándote de mi corazón, de mi cuerpo, de todo mi ser.

Supongo que tengo que estar agradecido de que un ángel tan bello haya hecho su aparición frente a un ser común y corriente.

Hoy te ves tan lindo, más perfecto que de costumbre. Ese rubor en tus mejillas y aquel suave delineado en tus ojos resalta tu belleza. El rojo te hace ver tierno, como un pequeño oso.

Mi preciosa flor, eres tantas cosas y todas buenas.

Te quiere.

-JJ”