XV

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El día del incidente

-Vamos Lance, tú puedes hacer esto- Se decía a sí mismo el cubano -Su celó está cerca, te le confiesas y tendrá tiempo solo para el, no hay ningún fallo-

Con la idea de tener el "plan perfecto" para su confesión al omega, se dirigió al punto acordado. Esperaría a que el azabache se presentara para poder darle un buen recuerdo que pueda atesorar, lo malo es que las cosas no siempre salen como esperamos.

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Durante el celo de Keith
-BIEN! Ahora no querrá a ningún alfa cerca de él- se decía a sí mismo el cubano -No me querrá y AAAAAAAAAAAA- Tenia una crisis total a mitad de una clase, algo "normal" para muchos a esa edad. -Todo por culpa de ese mal nacido, si no hubiera llegado a tiempo el- Estaba enojado y frustrado pero debía mantenerse al margen, por ahora.

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Actualidad

No creía que confesarse sea lo mejor, no quiere presionar a su "futura pareja" (claro, esto según lo que él pensaba en el momento).

El omega no hizo presencia en el instituto ese día, lo cual le preocupó. Mando mensaje tras mensaje al teléfono de Keith para asegurarse que estuviera bien.
Se había vuelto más protector con el, no quería que nada malo le pasara.
Al caer la noche logró recibir un mensaje.

Podría verte mañana en la azotea?, tengo que hablar contigo.

Esa era una señal de vida, bueno, contaba como una.

Claro, estaré ahí ;)

Esa pequeña carita hecha a base de puntuaciones gramáticas logró sacarle una risa triste a quien estaba del otro lado de la pantalla.

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Cada minuto que pasaba era una tortura para el azabache. El tiempo iba demasiado rápido y muy lento a la vez. Se sentía enfermo. Hablar con Lance no será lo mejor que le pueda pasar, tomando en cuenta el porqué lo haría.

Su cabeza se iba llenando de uno y un millón de escenarios, posibles respuestas y finales. Su mente estaba a un mil por hora. Sentía que no respiraba y una campaña lo devolvió a la realidad. Ya era hora, que fuese lo que Dios quiera.

A paso lento subió la escalera que daba a la azote, era hora de almuerzo así que no muchos lo vieron subir. Sus piernas temblaron y el viento que soplaba choco contra sus mejillas cuando abrió la puerta. Frente a el estaba el chico, solo unos centímetros mas alto que el, que desprendia un aura feliz una vez puso su mirada en el omega.

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-Lance...- Dijo en un pequeño murmuro el azabache.

-Hola- Intento no escucharse muy desesperado pero no funciono. -¿Cómo has estado?-

Hubiera respondido con un simple "estoy bien gracias" por simple cortesía pero era Lance. Sabía que si lo preguntaba era porque en verdad quería saber si estaba mal o si necesitaba algo de él.

-Y-yo solo necesito hablar, bueno solo necesito decir algo rápido-
Respiro profundo para comenzar a hablar con rapidez.
-La verdad, me gustas y entiendo que no te sientas de la misma manera- lo dijo tan rapido que Lance no tuvo tiempo de analizar lo que le acaba de decir.

"Yo en verdad le gusto? " - Pensó tiernamente el alfa. Había querido declararse pero que Keith diera el primer paso lo favorecía. En estos momentos estaba totalmente seguro que sus sentimientos no solo eran correspondidos, si no que el azabache se estaba ha riendo a la posibilidad de una pareja.

- Y estoy casi seguro que me rechazas desde ... ese día-

-"Espera, que está diciendo" -

-Yo solo quería que lo supieras, quiero avanzar y tenia que soltarlo-

-"PERO QUE-" -

-Lamentó si ahora el estar junto a mi te incomodaba-

-"NO"
- NO- el omega que había bajado un poco la mirada la subió para encontrarse con la mirada azulina del otro.

-Keith, yo, tú, t-tú- Tomo un fuerte suspiro para poder hablar coherentemente -Tu si me gustas y al contrario, yo creía que YO era quien te incomodaba. Solo esperaba a que pudieras cerrar la herida pero créeme que nunca me repugnaste-

Termino su discurso tomando las manos del ojinegro mientras se acercaba a él. Sus caras se comenzaron a juntar hasta poder quedar a milímetros una de la otra.

-Entonces, significa que lo podríamos intentar?- preguntó el asiático.
-Por supuesto que si- Término diciendo el cubano para cerrar sus ojos y besar la boca del omega.

Una corriente eléctrica recorrió el cuerpo de ambos. El tiempo se detuvo pero al mismo tiempo fue muy rápido para ellos. Al separarse entre abrieron los ojos solo para reír y quedar con las frentes unidas.

Ambos estaban felices de por fin haber confesado sus sentimientos.

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Colorín colorado, se acabo :)

La verdad soy mala escribiendo cosas pero bueno, igual fue mi primer fanfic.

Muchas gracias a todos por su paciencia y si tienen idea de cómo mejorar esto me lo pueden dejar en los comentarios. Estoy abierta a cambios en esta obra.

Gracias por el apoyo y los leo en otra historia :3

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