No todo lo que brilla es oro

capítulo 29. No Puedes Olvidarme Tan Rápido

NARRA HERMIONE.

Al llegar al Gran Comedor, Malfoy y Maris platicaban en susurros por un lado de la puerta de entrada, cuando ella me vio sonrió y me saludó con la mano.

-Buenos días - dije simplemente y seguí a mis amigos al interior del Gran Comedor, nos sentamos en la mesa de Gryffindor y yo de espaldas a la mesa de Slytherin.

El desayuno también fue muy tranquilo, Ron y Harry hablaban de Quidditch mientras Ginny y yo platicábamos a cerca de la boda, teníamos muchas invitaciones que enviar y estábamos haciendo la lista en un trozo de pergamino.

- ¿Cómo estas, Hermi? - preguntó Maris quien se sentó frente a nosotras sonriendo.

-Muy bien gracias - dije mientras garabateaba en nombre de Viktor Krum en un pergamino - ¿y tú?

-También - respondió ella

-Me imagino - dije mirándola fríamente, tenía que aclarar con ella el asunto de la boda de Draco cuanto antes y sabia que si no lo hacía ahora no lo haría nunca.

- ¿a qué te refieres? - preguntó ella confundida

-Debes estar muy feliz por la boda - le dije mientras escribía el nombre de Angelina Johnson, sobre el pergamino, con una fuerza que no pretendía.

-será una de mis damas, claro que lo está - dijo Ginny gañéndole un ojo a Maris quien le sonrió sorprendida.

-Gracias, Ginn - dijo Maris sorprendida mientras tomaba una manzana del frutero que había en medio de la mesa.

-No hablo de tu boda, Ginny - dije mirando fríamente a Maris quien palideció inmediatamente - si no de su boda con Malfoy.

- ¿Malfoy? - Preguntó Ginny mirándome con los ojos como platos - ¿pero si tú y él...? - negué con la cabeza y Ginny miro a Maris sorprendida.

-hemos terminado ya te lo dije

-No se dé que hablas - dijo Maris con voz ronca pues se había atragantado con la manzana.

-De tu boda con Malfoy, ya me entere que vino su mami a verlos y que se comprometieron - dije arrastrando las palabras y garabateando el nombre de Andrómeda Tonks en el pergamino con tanta fuerza que este se rompió.

- ¿Él te lo dijo? - preguntó en susurró.

-No, me entere por Pansy, el muy cobarde no "encontró" la oportunidad para hacerlo - dije furiosa remarcando la palabra "encontró" con tanta rabia que aunque me encogí de hombros intentado que pareciera que no me importaba, mi voz me delató - espero que sean muy felices.

Me puse de pie, doblé el pergamino, se lo tendí a Ginny e intenté sonreírle, pero mi cara se contorsiono en una mueca, me alejé de la mesa dando zancadas y alcancé a escuchar como Ginny, furiosa le pedía una explicación a Maris. Estaba por salir del Gran Comedor, cuando pude distinguir a Malfoy que estaba a punto de entrar, me detuve antes de encontrarme con él y deje que entrara, me lanzo una mirada triste y yo desvié la mirada, camine directamente a las mazmorras para entrar a la clase de pociones.

Fui la primera en llegar el aula estaba vacía, pero no me importo pues ya tenía destinada mi mesa, ya que desde la primera clase del trimestre, el profesor Slughorn nos había destinado nuestra pareja, por lo que Malfoy quedó como mi pareja en pociones todo el ciclo escolar, nuestra mesa era la más alejada a todo, pues estaba en un rincón del aula, me senté en mi silla y dejé mi mochila en el suelo, saque mi libro de pociones y comencé a leerlo.

Al cabo de unos minutos el aula se llenó de alumnos de Gryffindor y Slytherin, cierto rubio se sentó en la silla por un lado de mí y yo giré su cabeza hacia otro lado, mire a Ron que hacia pareja con Theo y ambos se voltearon a mí y me sonrieron encantados, les devolví la sonrisa y en ese momento el profesor Slughorn entraba.