Fierecilla [Tony Stark]

Capítulo IV

2014

— Aprovechando que te veo... toma — Pepper me entregó un sobre.

— Es el acuerdo prenupcial, revisado. Ya está autorizado por Tony... entonces solo debes firmarlo — me vio y luego se giró para marcharse.

— Sigo sin agradarte ¿Cierto? — volteó a verme de nuevo.

— Eso no debería de ser importante... a quién debes agradarle ya lo haces. Incluso se va a casar contigo — se giró nuevamente y caminó sin esperar mi respuesta.

Dejé los papeles sobre la mesita de la sala, ya luego los leería.

— Jarvis, amigo — llamé a la A.I.

— En que puedo ayudarte — me encantaba que por fin aceptara tutearme.

— ¿Qué tenemos para hoy? — en la pantalla de la sala se proyectó mi calendario del día.

— Prueba de vestido a las diez, luego verá a su amiga Cloe a las once para recoger a la señorita Lea que viene de California. Por último, tiene una cita con el señor Stark para cenar — ¿Lea venía hoy?

— Jarvis... ¿Qué fecha es hoy? — según mis cuentas Lea venía en la segunda semana de marzo, justo un mes antes de la boda.

— 12 de marzo — ¿12 de marzo? mierda.

— Jarvis cancela mi prueba de vestido... necesito una cita con la Dr. Montgomery — Jarvis hizo lo que le pedí.

— ¿Se encuentra bien señorita? ¿Necesita que llame al señor Stark? — ¡NO!

— ¡Jarvis ni una palabra! — me notificó sobre la cita ya hecha y me arreglé.

11:00

— Hace mucho que no te veo ¿Cómo estás? ¿Ya te graduaste? — Addison me saludaba y me invitaba a que tomara asiento.

— Me gradúo en dos meses... — ella me sonrió.

— ¡Linda eso es genial! Que joven... y dime ¿Cómo va tu boda? — le sonreí.

— Lo siento... el novio es un poco famoso. Todos hablan de eso — me reí.

— No Addison, todos hablan de lo joven que soy y de que me dobla en edad. Creen que estoy por conveniencia con él — ella me vio con pena.

— Mamá no ha querido contestar mis llamadas... la última vez que hablé con ella me dijo que "estaba loca" saliendo con alguien como él — ella negó.

— Si a ti te hace feliz... no importa mucho lo que diga el resto de la gente — le sonreí con tristeza.

— Creo que estoy embarazada... eso no ayuda Addy — ella me vio sorprendida.

— Nunca me retraso, jamás y resulta que tengo dos semanas de retraso... — ella negó.

— Pueden ser los nervios de la boda... un retraso sucede por muchos factores. Te voy a revisar — me indicó donde ponerme la bata y así lo hice.

— Antes de cualquier examen, voy a sacar un poco de sangre — asentí y le tendí el brazo.

— ¿Ustedes han hablado de hijos? — negué, pero muchas cosas me decían que él no los quería. Por ejemplo, el niño Harley... dijo que iba a ayudarlo, a apoyarlo, porque le molestaba que la gente tuviera hijos y no se hicieran cargo de ellos. Por eso él no los tenía.

Sentí el gel frío, mis nervios comenzaron a crecer. En ese momento sonó mi teléfono.

— Toma, dice que es el famoso Tony Stark — atendí.