One-shots Jujutsu Kaisen (male reader)

Kamo Noritoshi II

Segunda parte del anterior OS de este personaje

Los directores de ambos colegios de hechicería planearon juntar a sus estudiantes durante una semana entera con el propósito de practicar todos juntos mejorando sus habilidades para un futuro, dichas actividades se llevarían a cabo en Kioto siendo un viaje esperando por los estudiantes de Tokyo estando ansiosos por limpiar el suelo con aquellos estudiantes, el sentimiento de competitividad es mutuo

—Estando allá debo tener mucho cuidado, nadie sabe lo que pueden estar tramando para intentar matarme una vez más, en especial el vejestorio que tienen por director que quiere matarme cada que ve la oportunidad para hacerlo—pensó en voz alta mirando a sus compañeros de segundo año

—Tendrás que estar alerta todo este tiempo, no sabes cuando puedan atacarte, nosotros también estaremos preparados en todo caso de tener que ayudarte—dijo Maki para intentar hacerlo sentir menos abrumado por tener que estar constante al pendiente de sus entornos

—Salmón—Toge levantó su dedo pulgar en muestra de apoyo hacía su amigo

—Si tienes problemas nosotros te cubriremos la espalda—aseguró Panda para hacerlo sentir mejor dándole unas palmadas en la cabeza

—Mechamaru y Kamo serán una preocupación, esos dos no tienen remordimientos para atacarme—pensó en ello dejándose caer en su puesto con cansancio de tan solo pensarlo todo—Si es posible dejarlos fuera de combate en los primeros segundos estaría ahorrándome muchos problemas—

Cuando llegaron hasta su destino, Bushida miró el paisaje pensando que la tranquilidad se acabaría apenas pudiera un pie dentro de aquel colegio donde estarían quedándose los siguientes días, rogando que el tiempo pasara volando para estar de vuelta en Tokyo antes del tiempo previsto

Tuvieron un buen recibimiento común, siendo llevados hasta las habitaciones que usarán por los siguientes días dejando sus pertenecías teniendo que prepararse para los primeros entrenamientos en conjunto. Bushida miró hacía la ventana con las cortinas abiertas acercándose para cerrarlas, nadie sabe cuando una flecha pueda venir para querer darle de lleno en su cabeza, se acomodó acercándose hasta la puerta pero detuvo sus pasos al escuchar unos delicados pasos sobre el piso de madera

Se quedó quieto para evitar que la otra persona sienta su presencia mirando de nuevo hacía la ventana, su única vía de escape para evitar un posible combate en la habitación que "casualmente" queda en un pasillo solitario alejado de sus amigos

Es inútil intentar no hacer ruido, su presencia lo delata, su aura le delata sin quererlo retrocediendo abruptamente abriendo las cortinas notando que la ventana está sellada, tendría que romperla si es necesario sobresaltando cuando la puerta fue tocada

—¿Sí?—respondió intentando no delatar sus nervios

—Ya todos están en el campo de entrenamiento, tienes que apurarte—reconoció la voz de Kamo hablando con tanta suavidad

¿Estará siendo paranoico? No debe estarlo siendo, los estudiantes de Kioto son fríos de corazón pudiendo atacarlo sin miramientos al estar en solitario mandando al prodigio Kamo para acabarlo

Con un cuchillo corto la punta de su dedo dejando caer una gota de sangre en el suelo, eso sería funcional en caso de un ataque sorpresa abriendo la puerta para encontrarse con aquel muchacho azabache de ojos cerrados

—Kamo, ¿me extrañabas?—saludó con una notable sonrisa ocultando sus pensamientos de aquel muchacho

—En tus sueños, Maldición—respondió arrugando su ceño al fruncir sus cejas

—Te saldrán arrugas por tanto que frunces el ceño, relájate un poco, Kamo—dio un suave golpe en el entrecejo del contrario que se alejó abruptamente

—Vete a la mierda—insultó antes de darse media vuelta para ir hasta el campo de entrenamiento ignorando si lo está siguiendo o no

—Pensaba que al abrir la puerta me recibirás con una flecha directamente en mi corazón—comentó tocando su pecho donde está su corazón latiendo

—Te hubiera encajado esa flecha en la cabeza sin necesidad de que abrieras la puerta—respondió hostil teniendo sus puños apretados al caminar

—Aplicas mucho el concepto de amor duro—el azabache detuvo sus pasos para verlo notablemente molesto acercándose hasta tomarlo del cuello de la camisa para zarandearlo odiando esa asquerosa sonrisa que tiene en sus labios—Desliza tu mano un poco hacía arriba y aprieta, por favor—

—Eres un—aguantó sus palabras golpeándolo contra la pared abriendo sus ojos oscuros—Eres un ser tan desagradable, repugnante y asqueroso, nada más sirves para sacarme de quicio ¿cuál es tu maldito problema, fenómeno?—gruñó escupiendo sus palabras como veneno

Es cruel, pero Bushida aprendió a vivir con la crueldad de las personas que lo ven como una simple maldición que corrompe el sistema de los chamanes, dando una sonrisa porque dejarse llevar por esos comentarios nada más daría el resultado que esas personas mal intencionadas quieren, deseando quebrarlo mentalmente

Su mirada se suavizó, sus labios se juntaron en una sonrisa que transmite calidez dejando de lado la arrogancia de su anterior sonrisa. Su corazón fue dañado en una pequeña porción por las palabras de aquel que le terminó enamorando, pero ese es su castigo por enamorarse de alguien que lo odia

—Mi principal problema es estar enamorado de ti, Kamo. Ya deberías saberlo—dijo con tranquilidad, la tela de su uniforme es apretada con mayor brusquedad pero no hace nada para detener la acción—Esa noche no mentí cuando dije que me mataría la persona que me gusta. Si pudiera elegir quien acabe con mi vida algún día, te elegiría a ti sin importar lo retorcido y masoquista que sea—

—Qué...desagradable eres—la tela de su uniforme fue soltada quedándose largos instante apreciando los ojos oscuros ojos de Kamo

—También soy muy estúpido, al enamorarme de ti sabiendo que todas las veces que lo diga me terminarás rechazando e hiriendo—se alzó de hombros despreocupado—Yo seguiré aquí, con mi corazón rompiéndose por ti—

Noritoshi no dijo nada, manteniéndose en un extenso silencio antes de darse media vuelta para caminar hasta la zona de entrenamientos donde estarán los demás preguntándose por sus ausencias de tanto tiempo, _____ silenciosamente aceptó su rechazo pasando la manga de su uniforme por sus ojos aprovechando que está dándole la espalda siguiendo sus pasos