One-shots Creepypastas Y Tú

Ticci Toby y tú (parte 2)

Continuación del primer One-shot de Ticci Toby.

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Sinopsis

Toby quiere divertirse esta noche, pero no tiene a nadie con quien hacerlo. Quizás un viejo amigo lo ayude a aclararse la mente.

Toby quiere un compañero en sus juegos del mal.

Pensó en ti, pero lo descartó de inmediato. Estas rota en cuerpo y alma y además no desea verte ahora. No entiende tampoco, sabe que es ridículo, pero por algún motivo espera como si un milagro te restaurara como nueva al otro día. Tú no eres como él y por eso se ríe de lo tonto que es ese sentimiento. ¿Por qué sigue pensando eso?

Pensó en todos los imbéciles que conocía y recordó a Cody.

Por eso está golpeando tan frenéticamente la puerta de la casa del lago que Cody decidió atormentar.

Fue cómico, cuando Cody estaba apunto de hacer sus fechorías con una pobre anciana el inoportuno de Rogers le tocó la puerta dándole un susto que lo dejó blanco y encendiendo un brillo de esperanza en la mirada de la vieja.

Casi lo asesina cuando abrió la puerta, pero después le dio un calambre horrible en el estómago como para vomitar una vez reconoció a Toby, soltó un suspiro de alivio y luego lo confrontó con su mirada arrogante recordando su enojo con Rogers, olvidando por completo que esta no era ni su casa.

— así que finalmente te aburriste de tu mascotita y volviste a mí. — Cody siseaba con odio.

— ... — Toby lo mira fijo en un silencio de muertos mientras se moja bajo la lluvia — Hola — dice con timidez.

Cody iba a hablar pero la vieja empieza a soltar gritos histéricos que lo hacen girar la cabeza y mirarla con odio.

— ¿Tu novia te comió la lengua o qué? ¿Así saludas a otro vil pecador?— Cody alza la ceja. Toby sigue en sepulcral silencio mientras se moja esperando que Cody lo deje pasar por la puerta. — estoy ocupado ahora, compadre. — Toby sigue en su sitio — Entra de una vez, pareces un perrito abandonado mojandote ahí afuera. —  dice derrotado.

El sonido de un diminuto seguro correrse hacen a Cody girarse por completo en dirección a la señora que ya no estaba.

El sudor le corre por toda la cara, no debió subestimar a la viejita amarrando sus manos con las cuerdas tan flojas, pero si se veía que con suerte se sostenía en pie ¿Y esas fuerzas? De dónde las sacó.

— sí, vengan rápido estoy muy asustada. — cuelga.

Más extrañado quedó Cody cuando notó que en solo medio minuto la vieja había soltado sus sogas y ¡Llamado a la policía! Y por poco se caga encima cuando la señora soltó el teléfono y se asomó por el marco de la puerta con ¡Una puta escopeta más grande que ella misma! ¿Pero esa vieja era la tataraabuela de Flash o que carajos?

¿Toby? Ese idiota estaba más perdido en sus pensamientos que ni atención le estaba tomando a la situación.

Cody ya venía sus cabezas rodar cuando la anciana les alzó el cañón con los dedos temblorosos bien seguros para disparar.

Estaban jodidos.

Antes que un chasquido de dedos, Cody se lanzó contra Toby y ambos cayeron tras los sillones. El disparo rompió la ventana con su marco y Cody ya estaba que le rezaba al cuadro de la virgen María que estaba colgado tras de ellos.

La señora cayó cómicamente de espaldas después del tiro.

Cody y Toby asomaron la cabeza y la señora ya se estaba preparando para darles un segundo tiro desde el piso.

— ¡OH, por favor! ¡Que rencorosa eres perra! — gritó Cody.

— ¡Salgan de mi propiedad, hijos del diablo! —

Pasa a disparar en lo que trataba de pararse y el cartucho rebotó peligrosamente por todos lados, metiéndole un buen susto a los dos imbéciles. A Toby por algún motivo le parecía divertido todo esto y se negaba a aniquilar a la vieja con sus hachas.

La vieja casi les metió un tiro en el culo más veces de las que trataron de salir de esa casa, hasta que finalmente lograron saltar por la ventana a tropezones.

— ¡más te vale cerrar bien tus puertas y ventanas o te voy a hacer una visita que no vas a olvidar! — Cody gritó desde afuera, el sonido del seguro de la escopeta lo callaron rápidamente.

La sirena de una patrulla policial se escuchó acercarse y Toby reaccionó finalmente agarrando a rabioso de Cody que se estaba palabreando con la vieja.

—¡Mierda! ¡No te quedes ahí parado idiota, corre! —

Al final de la noche, mojados, cansados y hambrientos finalmente analizaron como la aparente abuela de Rambo los humilló hasta las patas. ¿Qué fue todo eso? Parecían novatos. Si se enteran los otros asesinos serán la burla por años, perderían todo su respeto en segundos.

Cody observa nervioso a Toby, sabe lo brusco de sus cambios de humor, no sabe si lo pasado lo pondrá de buenas o como el diablo mismo.

Se lo nota tranquilo. El muchacho suspira, va a decir algo.

— cállate. — se le adelanta Toby.

Tres noches pasaron antes de volver a verle la cara al maldito de tu secuestrador, cuando finalmente rezabas casi llorando de rodillas porque se hubiera aburrido de ti y te dejara en paz, el imbécil vuelve.

Pero no volvió solo, nunca en la vida temblaste tanto por ver un envase de gasolina.

Dio el primer paso dentro y supiste que tus segundos estaban contados, hay una pequeña chispa de diversión en sus ojos.

— hoy es navidad, ____ — dice feliz e inocente.

Te tira todo el contenido por la cabeza hasta casi ahogarte, un poco te entró a la boca y fue asqueroso.

Toby sacó una cajetilla de fósforos y del interior agarró un cerillo tarareando canciones navideñas.

— ¿Cómo voy a recibir mis regalos sin un brillante árbol de navidad? — 

Niegas totalmente blanca suplicando que no tire ese cerillo, pero ya es demasiado tarde, tus gritos fueron los mejores villancicos de navidad para sus oídos, cantó feliz con tus gritos de fondo viendo como su brillante árbol de navidad se tuerce en todas las posiciones posibles.

Hermosa y brillante navidad.

Por suerte te encontraron y te dieron las curaciones correspondientes en el centro de salud, pero lastimosamente nadie curó tu mente y nunca volviste a ser tú.

Ahora solo tienes el recuerdo en cada Navidad que pasas en este maldito centro psiquiátrico tu rostro quemado y desfigurado frente al espejo.

Eras tan hermosa, pero él te volvió un monstruo.

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Me divertí tanto con la abuelita de Rambo. Jajshaja