𝟎𝟕

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Si había una palabra para definir como había sido la última semana, Jeno definitivamente escogería complicada.

Literalmente su vida se había vuelto una de esas historias donde el protagonista es un chico común pero en realidad no es un chico común por qué esconde un gran secreto y al final es un hombre lobo, casi como un chiste, pero era exactamente lo que estaba sucediendo. Una de esas historia, de las cuales se llegó a reír por algún meme que vio en un sitio de internet y de las cueles consideraba completamente ridículas y cliché.

Hola, ese era Jeno, un adolescente común que de un día para otro se había convertido en un ridículo hombre lobo, asustando a toda su familia y no bastando con eso, que ahora corría peligro de morir atacado por un monstruo aún más ridículo, al cuál toda la gente de su ciudad comparaba con el chupa cabras.

Jeno tenia unos días con dolor de cabeza de tanto pensar, de tanto esforzarse en comprender, de tanto obligarse a creer.

Si, aún consideraba todo ridículo, pero haberlo vivido en carne propia no lo dejaba preferir no creer y olvidar la situación.

Y es que incluso tratar de explicar la manera en la que Jeno se sentía era complicada, había pasado ya por todas las emociones que pudo sentir.

Y la idea que más le hacía ruido era que “su lobo” le pidiese tanto estar cerca de Jaemin. ¿Era necesario complicarle así la vida?
Y no es que el odiara a Jaemin, si bien el récord era que siempre se llevaron mal, desde su perspectiva era más bien que a Jaemin no le caía muy bien y Jeno en consecuencia tampoco le agrado mucho, pero no era nada específico, simplemente le parecía fastidiosa su actitud caprichosa con él la mayoría del tiempo y prefería mantenerse alejado.

Pero a decir verdad, Jeno siempre había querido ser un poco más cercano a el Omega, no necesariamente ser los mejores amigos, pero ser vecinos que se saludaran cordialmente e intercambiarán una que otra palabra de vez en cuando no le parecía nada mal.

Pero de alguna manera las cosas se habían dado para que crecieran siendo una especie de enemigos y la situación actual era algo incómoda.

Desde el punto de vista de Jaemin, respecto a la  súbita cercanía del nuevo alfa, las cosas no eran muy diferentes, sin embargo llegaba a entender la razón de la situación e independientemente de si le gustaba o le desagradaba, lo dejaba pasar.

Resulta que en los últimos días, específicamente después del incidente, Jeno comenzó a rondar al Omega y a liberar hormonas cerca de el casi como si lo estuviera cortejando.

En un comienzo le hecho la culpa a qué el celo de Jaemin coincidió con la presentación de Jeno pero cuando esté llegó a su fin, Jeno insistió en quedarse a lado del Omega, no literalmente, por qué Jaemin no permitiría aquello, pero si en un relativo rango.

Jaemin recuerda como Haechan Sugirió que tal vez estaban destinados, pero el disgusto ante la idea por parte de Jae y más que nada que el no sentía ninguna clase de emoción romántica ante el alfa, descarto la idea.

Además, ¿Que era eso de pensar en Parejas destinada? Haechan ya estaba muy grandecito para creerse leyendas tontas.
En realidad a Jaemin le gustaba secretamente creer en esas leyendas tontas también, pero el hecho que se sugiriera que el y Jeno… ¡JA! Ni pensarlo.

Pero en fin, volvamos a la tortura de Jeno.

El día que fue presentado con el Alfa de la manada fue estresante, como todo el tiempo que pasó antes de ese, aunque tenía que admitir que la mayor parte del día se la había pasado en una especie de estado de shock y la otra en negación junto con sus padres, casi no tuvo tiempo, ni cabeza, para razonar la situación.

  HΛDӨ  |  ɴᴏᴍɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora