Los cazadores del fuego

Todos quieren a Azula (parte 1)

Muy temprano en la ciudad, una chica de cabello negro trenzado y gafas camina por las calles acompañada por un anciano abrigado con una gran capa

-no puedo creer que después de tanto tiempo este lugar no haya cambiado en nada

-¿Hace cuánto fue la última vez que estuviste en Ba Sing Se?

-hace seis o siete años

-eso es mucho tiempo,

-si y...

Azula se interrumpe así misma al escuchar su nombre entre la gente

Al poner más atención nota a la gente algo preocupada, pero hay un factor en común en sus comentarios, dos palabras: princesa Azula

-¿Que ocurre?

-algo anda mal

Al doblar una esquina se encuentran con un grupo de personas mirando algo en un muro, al acercarse un poco Azula se da cuenta de que es lo que pasa, sin perder tiempo toma al anciano por el brazo y se aleja

-¡Maldición!

-otro afiche de se busca

-no, este es diferente, me están acusando de asesinato

-¿Asesinato? Pero no hemos...

-ese maldito rey... Tenemos que acelerar nuestro plan, debemos ver a Chieko y salir de Ba Sing Se hoy mismo

-¿El rey? ¿Por qué un rey te acusaría de asesinato?

-no hay tiempo para historias, hay que movernos

De forma rápida, pero sin llamar la atención la pareja se encamina a la estación más próxima, no pasa mucho tiempo hasta que llegan a su destino en la zona Norte de la ciudad, al momento de descender entre el tumulto, por estar observando a una joven descalza Mythos tropieza con otra chica

- (M) oh, disculpe jovencita

- (?) No se preocupe, fue mi culpa

- (A) fíjate por dónde caminas

- (??) ¡ES ELLA!

La joven descalza de algún modo los ha descubierto, al mismo tiempo Azula cruza miradas con un sorprendido joven con una cicatriz en el rostro

-(A) ¡Maldición, corre!

Zuko está a punto de atacar cuando El "anciano" deja caer algo, ocurre una pequeña explosión y de desata un alboroto dentro de la estación, la gente grita, corre, se empuja, llegan guardias, pero aquello es un caos total, entre la conmoción Azula y Mythos se las arreglan para encontrar una salida y alejarse del lugar

-¿Cómo fue que nos descubrieron? Y sobre ¿todo quiénes eran ellos?

-mi hermano y sus amigos

-¿Tu hermano?

- ¿¡Porque rayos tenían que venir aquí!? ¿Porque justo ahora? (Patea con furia una botella y se hace añicos contra un muro) Me preocupare por Zuko más tarde, ahora débenos llegar con Chieko, una vez que recupere mi fuego ellos serán una molestia menor

-bien, andando

-¿Sin preguntas? ¿Sin comentarios extraños?

-no está vez, ya hay mucha gente buscándote, si recuperar tu fuego ayuda a nivelar las fuerzas no hay tiempo que perder

Mientras tanto en una de las salidas de la estación

-(T) ese sujeto con el que tropezaste definitivamente no era un anciano