The Rape of Jonathan Beck

Capítulo 14

Cuando habían llevado a Leonard a la jefatura las cosas empezaron a ser un caos, todo por cometer quizá un terrible error y eso era dejar en libertad al joven Everett.

El padre del joven no había pedido un abogado, solamente quería sacar toda la verdad que tenía guardado dentro suyo. Tenía mucha vergüenza contar con detalle como había empezado el infierno que le hizo pasar al señor Beck.
Era una completa vergüenza como amigo de la víctima, ser el que dejó que las cosas fueran cada vez peor.

Cómo por ejemplo culparle de su propio ataque y arruinando su vida por completo, llevándole a una gran desesperación de mantenerse lejos de las personas por temor a ser señalado.

Obviamente ya era tarde para arrepentirse pero quería terminar las cosas de una vez y recibir el castigo que quieran darle. Solo quería sacar el peso que estaba cargando por mucho tiempo.

– Ojalá pudiera decirle que lo lamento mucho...– Podía verse a un oficial preparando las esposas metálicas para poder llevárselo.

– Creo que ya es tarde para éso. – Terminó por decir el oficial mayor con el rostro serio. – Saquen a ése hombre de aquí por favor, tenemos que empezar la búsqueda del hijo lo más pronto posible, busquen en todos lados ya sea en la escuela, su casa o sus amigos.

– ¡Si señor! – Respondieron unos tres oficiales para luego salir de la habitación.

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Jonathan se encontraba tranquilo en el hospital, había almorzado muy poco pero se sentía más calmado en ése lugar tan tranquilo aunque aún así seguía pensando en lo que pasaría con él de ahora en adelante.
Todavía estaba en marcha sobre mudarse así que esperaba poder vivir tranquilamente cuando todos los problemas pudieran resolverse.

Su cabeza dolía un poco pero lo aguantaba muy bien, se entretenía con la vista de su ventana que estaba al lado de su cama así que sin darse cuenta se dormía a veces.

El ruido de la puerta se había escuchado despertando al señor Beck de repente, lo asustó un poco pero al darse cuenta quién había entrado no tardó en tranquilizarse.

– ¿Cómo se encuentra señor Beck?, Quise visitarlo ahora que tengo tiempo. – No tardó en sonreír el doctor mientras acercaba una silla al lado de la cama.

– Yo...estoy mejor ahora, pero quisiera poder tener algo de ropa.

– Bueno éso será difícil ya que no tienes a ningún familiar que pueda ayudarte a traerte tus cosas.

– Podría ir yo. – Intentaba acomodarse en la cama para poder sentarse aunque el doctor no tardó en ayudarlo.

– No puedo permitir éso, lo lamento además...– Tocó el vendaje de su cabeza para poder revisarlo. – Aún no estás en condiciones para poder salir por tu cuenta.

– Estoy bien, solo quiero ir a empacar algunas ropas y volveré. – Se puso de pie para demostrarle que no había problema con su cuerpo, aunque él sabía perfectamente que quizá aún sentía dolores en las heridas que esa bata cubría. – Por favor será rápido,  tomaré un taxi.

El doctor estuvo pensando por un rato, realmente no quería dejarlo marchar ya que le preocupaba así que al estar decidido tomó una decisión.

– De acuerdo, pero déjame llevarte así será más rápido, te llevaré en mi auto y volveremos de vuelta aquí, ¿Aceptas?

– Pero...¿No tiene trabajo?

– Puedo ausentarme un momento, no creo que tardemos mucho. – Sonrió tranquilo convenciendo al señor Beck así que no tardó en levantarse de su asiento. – Primero espérame aquí, te traeré algo de ropa.

– E-Esta bien...

Había esperado quizá unos diez minutos para volver a ver al doctor con una ropa algo grande en sus manos, era extraño pero no tardó en cambiarse mientras el otro hombre esperaba afuera de la habitación.

Tenía suerte de no tener ninguna molestia en sus brazos así que pudo vestirse tranquilo.
Al momento el doctor volvió a entrar observando que ya estaba colocándose las zapatillas negras así que no tardó en reírse un poco.

– Está un poco grande la ropa ¿no?

– Sólo un poco pero... ¿Dónde pudo conseguir ésto?

– Es mío. – Se rió un poco más fuerte para luego salir junto con su paciente hasta la dirección donde vive.

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Después de avisar a algunos compañeros subieron al vehículo que estaba estacionado, el doctor empezó cualquier conversación para poder charlar con el señor Beck aunque al parecer no estaba muy a gusto.

Estuvieron así por un gran rato hasta llegar a la propiedad del paciente, era un bonito lugar. El doctor no dejaba de mirar el lugar sin darse cuenta que Jonathan ya estaba abriendo la puerta de su casa, al darse cuenta se acercó para poder ingresar pero su celular no tardó en sonar.

– Disculpa, entraré en unos minutos así que ten cuidado en ordenar lo que veas ahí, aún sigue siendo el lugar importante para la investigación.

– No se preocupe, sólo agarraré lo necesario. – Le costó sonreír así que no tardó en ingresar solo empezando a sentir algo de incomodidad.

Le había costado mirar su propia casa, las cosas estaban como lo había dejado aunque la televisión estaba apagado y en el suelo se pudo ver unas gotas de sangre en el lugar donde fué atacado.
Quiso seguir adelante para poder subir a su habitación para preparar un bolso con sus ropas y otras de sus pertenencias pero con cada paso que daba en las escaleras podía sentir un terrible escalofríos.

Le era difícil de entrar a su propia habitación, la puerta ya estaba abierta así que lo que observó le hizo recordar cosas muy horribles. Parecía que le faltaba el aire, ver la sangre en la almohada y la cama desordenada logró hacer que unas lágrimas cayeran por su mejilla.

Limpió su rostro rápidamente y empezó a acercarse a su armario para sacar varias ropas mientras sus manos temblaban, quería mantenerse calmado ya que creía que caería al suelo sin fuerzas.

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El viaje de vuelta al hospital fué tranquilo aunque Jonathan tuvo una visita que le informó sobre lo que estaba sucediendo con Leonard Everett y su hijo.
Aunque aún no tenían ninguna pista sobre el joven Jack prometieron encontrarlo y buscar su paradero mientras el padre estaba bajo arresto hasta el juicio que se iba a realizar dentro de unas semanas.

Lo único que sintió el señor Beck fué miedo, tal vez algo de lastima por lo que sucedería con Leonard pero tenía que dejar de ser tan amable sintiendo pena por él.
En cambio no podía negar que le aterraba saber que Jack aún seguía libre, no quería ni imaginarse si podría cruzarse con él algún día.

Por ahora sólo quería descansar lo suficiente para poder mudarse luego del juicio de Leonard, solo quería huir a otro lugar, empezar de nuevo y quizá conocer personas nuevas.

Salir a lugares tranquilos y poder respirar aire fresco mientras disfrutaba de una bebida.

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Quizá es raro pero actualicé rápido jajajaja 😂😂.
Espero hayan disfrutado del capitulo, veremos como podría terminar las cosas.
Quizá haga que las cosas pasen rápido pero es que me resulta más fácil hacerlo así.