Capítulo 15

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Tras unas semanas ya había llegado el alta de John, su herida se veía mucho mejor aunque el día que tuvieron que quitarle las puntadas fué muy doloroso.
Otras personas estarían muy felices al ser dado de alta pero para el señor Beck era muy diferente, si se sentía aliviado de irse ya podía volver a su casa pero éso no quería decir que su vida iba a ser tranquila como en los viejos tiempos.

Había tenido algunas pesadillas que lo molestaron en las noches, despertándose en la oscura habitación y dejándolo tan asustado que apenas podía calmarse.

Una noche había sido peor que las anteriores, soñando algo que por alguna razón le daba miedo, recordando solamente que corría por un bosque tan grande que parecía perdido en ése lugar. Corriendo asustado en la oscuridad sin encontrar alguna salida, pidiendo ayuda sin ser escuchado.

No quería recordar más ésos sueños horribles así que se apresuró para preparar su bolso y poder irse, ya se había despedido del doctor Liam así que se acercó a la puerta para poder retirarse.
Tenía que admitir que el único que lo acompañó en días horribles era ése hombre, era un buen sujeto así que estaba un poco contento de haberlo conocido.

Ya cuando había salido del hospital pudo sentir un viento que lo relajó un poco, estaba haciendo algo de frío así que cerró bien su campera para detener algún taxi que pudiera pasar por ahí.
Tenía que admitir que estaba muy nervioso para volver a su casa, después de todo volvería a estar solo en ése lugar donde los recuerdos volverían otra vez a su cabeza.

Trató de verse tranquilo y siguió con lo suyo viendo el hospital por última vez, los problemas aún no habían terminado ya que todavía Jack no había sido encontrado aunque al parecer querían seguir con el nuevo juicio contra Leonard por cómplice de varios ataques que nunca delató a la policía.

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Cuando había abierto la puerta de su casa sus manos no quisieron dar ese empujón para abrir la puerta, no quería entrar pero si se quedaría más tiempo en la puerta de seguro algunos vecinos podrían ver éso sospechoso.

Apretó con fuerza la cuerda de su bolso y entró de una vez cerrando la puerta, caminó por los alrededores y lo primero que había hecho era irse corriendo a cerrar cada ventana con seguro para luego empezar a limpiar la sangre que quedó en la sala junto al teléfono.
Parecía un loco limpiando la sangre seca con fuerza pero no quería volver a verlo.

Luego de haber terminado siguió con su propia habitación aunque ya le habían informado que se habían llevado varias cosas como prueba del ataque así que al entrar no volvió a ver las sábanas y la almohada.

Jonathan suspiró para luego irse de ése lugar, necesitaba tranquilizar su cabeza ahora que había llegado, terminó por limpiar la casa como si alguien lo estuviera obligando. Arrojando varias cosas a la basura y cansándose hasta el punto de caer rendido en una de las sillas.

Tan solo quería mantenerse ocupado aunque la noche parecía acercarse, estuvo en la sala todo el día hasta que la hora pasó y el cielo ya empezaba a oscurecer. No entendía que le ocurría pero empezó a encender todas las luces de la casa, quería mantenerlo iluminado por alguna extraña razón.

Luego de unos minutos se había cocinado algo y al terminar estuvo hurgando su computadora notando los mensajes que le habían mandado del trabajo. Era obvio que iban a despedirlo, no se había comunicado por varias semanas aunque ya ni le importaba su empleo.

Solo lo apagó dándose cuenta que sus ojos ardían por el sueño, necesitaba descansar luego de todo el trabajo que había hecho aunque no quería volver a subir a esa habitación.
Agarró su bolso y empezó a sacar algunas ropas para poder usarlo como abrigo en la noche, estaba decidido en dormir en la sala.

Pero mientras acomodaba el lugar donde dormiría alguien había golpeado la puerta con algo de fuerza, escuchar ése ruido lo había asustado mucho, se apresuró para correr a su cocina y sacar uno de los cuchillos y sostenerlo con fuerza en sus manos.

Estaba dispuesto a defenderse aunque tuviera que quitarle la vida a la otra persona, su respiración se había acelerado mientras se acercaba a la puerta pero una voz ajena hizo que reaccionara.

– ...Señor Beck. – Se escuchó de la nada y pudo notar unas luces azules y rojas haciéndole darse cuenta de quién se trataba.

Escondió rápidamente el arma y abrió la puerta encontrándose con unos oficiales que no tardaron en informarle que estarían cuidándolo por unos días hasta que tengan alguna pista de Jack Everett. Que si tiene algún problema podía llamarlos y de inmediato estarían ahí para ayudarlo en lo que necesite.

Agradeció a los oficiales y terminó por cerrar la puerta, terminando por apoyar su cabeza en la puerta lamentándose en la tontería que estaba a punto de hacer, era obvio que tenía mucho miedo pero las cosas iban a cambiar cuando el juicio contra Leonard empiece.

Estaba dispuesto en marcharse lo más pronto posible como había planeado así que volvió a acercarse a su sofá para intentar dormir, solo quería cerrar sus ojos y esperar a que la noche termine rápidamente.

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Su cuerpo dolía un poco cuando se había despertado, otra vez había tenido esa maldita pesadilla así que no descansó tanto como quizo, lo primero que había hecho era acercarse a la puerta para notar que los oficiales seguían ahí. Sintió un poco se pena que ésos hombres tuvieran que dormir ahí por culpa de él pero de todas maneras siguió con lo suyo para prepararse el desayuno.

Tomando solamente café ya que no había hecho las compras, pero de todas maneras no le importaba desayunar solo éso.

Quiso ver la televisión o algo para entretenerlo pero antes de que hiciera algo su celular empezó a sonar, al revisar se dió cuenta que el mensaje era de Liam preguntando si todo estaba bien.
El señor Beck solo terminó por sonreír mientras empezaba a contestar su mensaje, sin darse cuenta se había sentido más tranquilo tras conversar con ése hombre.

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Muy corto lo sé jajajaja 😂
Lamento éso pero aún así espero lo disfruten, buenas noches ❤️

The Rape of Jonathan BeckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora