Siempre fue ella (Harry Potter y tú) [tercer año]

Capitulo 7: Era perfecta

El último día pensé en que mañana ya podría ver a los chicos en el expreso de Hogwarts. Me levante de la cama con una sonrisa, me vestí y camine buscando un lugar para comer cuando alguien gritó mi nombre

X: ¡Harry! ¡HARRY!—ahí estaban los dos sentados en la terraza de la heladería, con una chica de espaldas tapándose los oídos... la había visto antes junto a la abuela de neville. Ron estaba más pecoso que nunca, Hermione con el pelo un poco menos esponjado y la chica de espaldas tenía el pelo negro ondulado

Ron: ¡Por fin! —dijo sonriéndome de oreja a oreja cuando me senté a lado de la chica peli negra—hemos estado en el Caldero Chorreante, pero nos dijeron que habías salido, y luego hemos ido a Flourish y Blotts, y al establecimiento de la señora Malkin, y...

X: Ron... respira—se empezó a reír junto a Hermione, y fue ahí cuando la vi... era ___, se veía tan... bonita

Hermione: ¿Harry?—fue ahí cuando le di cuenta que estaba mirándola mucho

Harry: Compré la semana pasada todo el material escolar. ¿Y cómo sabían de que me quedaba en el Caldero Chorreante?

Ron: Mi padre —dijo restándole importancia

___: yo no lo sabía, Hermione llegó a mi casa a despertarme... luego dijo que vendríamos aquí y eso es todo— volteó hacia mi

Sus ojos azules me veían a mi, eran tan bonitos, sus labio eran gruesos y de un rojo muy bonito, su tés blanca, su cabello negro ondulado. Se cubría con una camisa grande de cuadros... era perfecta

Hermione: ¿Es verdad que inflaste a tu tía, Harry? —preguntó muy seria, interrumpiendo el momento

Harry: Fue sin querer —respondí sonrojado mientras Ron se reía— perdí el control

____: espera... ¿inflaste a tu tía? Eso está—vi un brillo de diversión en sus ojos, pero Hermione carraspeó—... esta muy mal Harry—cambió a un tono severo

Hermione: No tiene ninguna gracia, Ron —dijo con severidad—verdaderamente, me sorprende que no te hayan expulsado

Harry: A mí también... no sólo expulsado, lo que más temía era ser arrestado—Mire a Ron— ¿No sabrá tu padre por qué me ha perdonado Fudge el castigo?

Ron: Probablemente porque eres tú. ¿No puede ser ése el motivo? —se encogió de hombros, sin dejar de reírse— el famoso Harry Potter... no me gustaría enterarme de lo que me haría a mí el Ministerio si se me ocurriera inflar a mi tía, pero primero me tendrían que desenterrar porque mi madre me habría matado. De cualquier manera, tú mismo le puedes preguntar a mi padre esta tarde. ¡Esta noche nos quedaremos en el Caldero Chorreante! Mañana podrás venir con nosotros a King's Cross. ¡Ah, ___ y Hermione también se quedará allí!—Hermione asintió con la cabeza sonriendo, mientras que ___ estaba confundida

____: ¿Que?—dijo aún confundida

Hermione: Mis padres nos han traído esta mañana, con todas nuestras cosas—sonrió

Harry: ¡Estupendo! —dije muy contento— ¿Ya compraron todos los libros y el material para el próximo curso?

____: esperen un momento... ¿cuando empacaste mis cosas?

Hermione: cuando entraste a la ducha—le sonrió

____: ahora entiendo porque tenías dos baúles... pero no entiendo porque no me dijiste

Hermione: no había mucho tiempo—se encogió de hombros

Ron: Mira esto —interrumpió abriendo una caja delgada y alargada— una varita nueva. Treinta y cinco centímetros, madera de sauce, con un pelo de cola de unicornio. Y tenemos todos los libros—señaló una mochila grande que había debajo de su silla— ¿Y qué te parecen los libros monstruosos?