El secreto de mi esposa

2.4K 7 0
                                    

#swinger #bisexual #lesbico #trio

---

Buscando bajar la monotonía después de varios años de casados decidimos darle un nuevo aire e ir a un bar swinger.

Entramos bastante nerviosos, nos tomamos unos tragos y empezamos a bailar. Entramos poco a poco en la onda con unas parejas que nos hicieron sentir más cómodos.

Lo bueno de este bar es que tiene niveles y en el primero ni siquiera te tienes que quitar la ropa, si no quieres. Nivel dos, mínimo en ropa interior. Nivel tres, desnudos con toalla y nivel cuatro, completamente como llegamos al mundo.

Poco a poco se fue prendiendo el ambiente, bailábamos con otras parejas, al finalizar cada canción nos preguntábamos como nos sentíamos y evaluábamos el nivel de celos. Todo bien, por ahora solo unos coqueteos y algunas caricias indiscretas.

Al rato ella misma me consiguió una nena muy parecida a mi esposa: alta, trocita, con el cabello ondulado y nalgona, justo como me gustan. Me la acomodó de frente y me dio un beso mientras me bajaba las manos hasta su nalga dándole un buen apretón, la nena solo se rio.

Ella se fue a bailar con su novio, pero al contrario de nosotros guardando su distancia.

La nena me pasó las manos por los hombros y se me quedó mirando a los ojos sonriendo esperando a que diera el próximo paso. Miré a mi esposa que estaba muerta de la risa y me confirmó moviendo la cabeza que lo hiciera.

Tremenda chupeteada nos péganos ahí de pie. Su novio y mi esposa solamente bailaban, mi esposa le hablaba en secreto al oído, nos miraban y se morían de risa.

Se acabó la canción y mi esposa se vino caminando con una carita endiablada. Me corrió a un lado separándome de ella y caí sentado en el mueble de nuestra mesa. La cogió a ella por la cintura y se la empezó a comer a besos.

«¿What? ¿Qué fue eso? ¿Mi esposa con otra mujer?» dije en mi mente completamente sorprendido.

Se separaron y ella me vio la cara de atontamiento, solo arrugó la nariz y se rio como una niña chiquita cuando está a punto de hacer una travesura. Se la llevó a ella de la mano hasta una esquina y nos llamó a los dos hombres para que fueranos detrás.

Colocó a la nena con las manos apoyadas contra la esquina de una pared, ella cual requisa de policía le tocaba de arriba a abajo. Le dijo algo al oído y la nena le confirmo moviendo la cabeza.

Le abrió el cierre trasero de la camisa, luego le quitó el brasier y por detrás le agarro los senos pasando sus manos hasta adelante, le beso la espalda el cuello. Se metió el lóbulo en su boca y lo chupo mientras le decía algo que no pude escuchar.

- Si, acá mismo si quieres --respondió la mujer con clara excitación--

Le abrió el jean y se lo bajó con tangas y todo hasta sus muslos. La movió de lado hacia una silla de cuero cuadrada sin respaldo y reposabrazos. La nena cayo en cuatro, extendiendo sus manos por fuera arqueando su espalda y levantando la nalga.

Mi esposa se hizo de rodillas detrás y se le comió el sexo con hambre, como si fuera algo que anhelaba hacer desde hace años. Cerraba los ojos se saboreaba sus jugos, la llenaba de saliva, con su nariz la penetraba en su sexo y con sus manos acariciaba su clítoris.

- ¿Ay diosss está de dónde salió?

Preguntaba la otra mujer y yo me hacia la misma pregunta. «¿Quién demonios es esta mujer? ¿Mi esposa?»

Le separó las nalgas subió con su lengua pasándola por toda su raja hasta llegar al espacio entre sus dos agujeros para darle golpes con su lengua. Luego se saboreó todo su culo sacando su lengua hasta donde podia y bajo de nuevo a su agujero penetrándo con diligencia en su sexo.

Entre Fantasía & Realidad (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora