Capítulo 29

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Logré comprometerme con Leticia.

El criado que había enviado un mensaje a la familia del duque dijo que su hijo estaba mucho más complacido que su padre, el duque. De hecho, el hermano de Leticia parece ser un hombre lleno de ambición. Tengamos cuidado.

Leticia ha venido al castillo real todos los días desde que se firmó nuestro compromiso. La educación de princesa ya ha comenzado.

Creo que es demasiado para una niña de siete años, pero suelen hacer estas cosas desde temprana edad. Leticia se esfuerza por hacer todo bien incluso con ese cuerpo pequeño.

Linda.

la Leticia esforzándose es tan adorable que le estoy echando un vistazo a escondidas

Tan linda.

Por supuesto, todos los días cuando vengo al castillo a monopolizar a la linda Leticia, tengo alrededor de una hora para tomar el té juntos.

Leticia me escucha en todo lo que digo. Estoy feliz por eso, pero Leticia no me dice mucho. No he visto tampoco esa sonrisa sincera desde el comienzo de su educación y solo cumple sus deberes con una sonrisa falsa y fría

¿Es por la educación? ¿Cambió por sí misma?

Me siento culpable, pero todavía la deseo.

No podía dejarla ir, pero aunque me esforcé para que me mirará, no fue el caso de que la distancia entre los dos se acortara, y habían pasado diez años.

No solo estaba jugando. Elogié a Leticia por su arduo trabajo durante la hora del té y dijé que lamentaba el trabajo duro y el dolor. Pero ninguno de ellos pareció llegar a sus oídos. Incluso si salíamos a algún lado para distraerla o le daba un regalo, su reacción no cambiaba.

Creo que estaba ansioso por recuperar esa sonrisa con mi propia fuerza si fuera posible.

Esto es malo.

Pero al acercarse nuestra boda, me sentí impaciente y llamé a una persona a la que normalmente no querría llamar.

«¿Entonces, qué piensas?»

El hermano de Leticia, Nadir, que tiene una expresión desinteresada

«¿De qué cosa?»

«Quiero saber qué piensa Leticia de mí».

Dicho esto, Nadir se lleva la mano a la mandíbula.

«¿Puedo decir eso claramente?»

«Está bien. Por favor sé sincero.»

«Bueno... ....»

Nadir abrió la boca como si hubiera decidido.

«En primer lugar, no tiene ni un fragmento de interés en ti».

Me sorprendieron sus palabras, pero pronto no tuve más remedio que admirlo

«De verdad......»

«Te reconoce como un príncipe comprometido, pero eso es todo. No es amor o afecto. Incluso sospecho de que no recuerda tu rostro».

La situación estaba más allá de mi imaginación.

«¿Me odia?»

«Me pregunto si puede contener esos sentimientos. Tal vez no le importes ni siquiera lo suficiente como para odiarte».

Un suspiro salió de mi boca.

«Yo la quiero mucho ...»

«Es completamente unidireccional».

Quiero escapar del entrenamiento de princesa!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora