De niña a mujer

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Fuiste importante pero estaba equivocada, no eres para mí. Me manipulaste y casi me alejo de todo lo que para mí ha sido siempre importante.

Estaba extasiada por la diferencia de edad, eso me hacía sentir empoderada, madura y menos niña, me hacía sentir que tenía voz para poder opinar, para ser escuchada. También me hiciste ver que se me había olvidado vivir...

Me hiciste crecer, hiciste que empezará a valorar otros factores que ni siquiera estaba teniendo en cuenta, me acompañaste e impulsaste a dar el último paso que necesitaba para ser la mujer que de niña siempre soñé.

Hoy te doy las gracias por aparecer en mi vida, por enseñarme a escuchar lo que me tengo que decir, por saber que busco y que quiero mostrar. Pero sobre todo por enseñarme que es el amor, que es el sexo y quién soy yo cuando estoy enamorada de la persona correcta en ese momento.

Puede que tuvieras razón, éramos la conexión que buscábamos pero no el momento que necesitábamos. El conflicto es que sigo siendo fiel a mis principios y por eso no creo en segundas oportunidades ni en amores atemporales. Vivo el aquí y el ahora, me hubiera gustado que me acompañaras en la intensidad de estos meses, pero no te preocupes estoy bien; estoy orgullosa de decir que ahora soy independiente, sé cuidarme, respetarme y disfrutarme sola. También estoy aprendiendo a que otros lo hagan por mí.


26/10/2021


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