cosmic dust | kooktae

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━ PARTE SETENTA Y CUATRO.

Taehyung tragó saliva, sentándose en la cama mirando sus manos y formando puños con ellas.

Volteó a ver a Jungkook cuando este murmuró algo entre sueños, lo que lo hizo sonreír suavemente al ver a su alma gemela dormir tranquilamente, cuyos labios formaron un pequeño puchero cuando el mayor apretó la mejilla contra la almohada de Taehyung.

Soltó una risita y se inclinó, besando la mejilla de Jungkook, escuchándolo suspirar en sueños. Lo miró con cariño, antes de ponerse de pie y salir casi corriendo de la habitación, dirigiéndose a la sala de entrenamiento.

Taehyung entró a la sala en completo silencio, cerró la puerta detrás de él y encendió la luz. Vacilante, caminó hacia el centro del lugar, mirándose las manos de nuevo, cerró los ojos y tratando de sentir su poder dentro de él tal como su madre le había dicho.

Pero no sentía nada.

El castaño dejó escapar un sonido de frustración, pero volviendo a concentrarse e intentar encontrar alguna energía, alguna chispa. Pero no había nada.

Tal vez... ¿Su madre le había mentido? ¿O tal vez, realmente había alucinado y nada de lo que había visto fue real?

Tragó saliva, paseándose de un lado a otro mientras tiraba de los mechones de su cabello castaño.

Sentía que se estaba volviendo loco.

Taehyung se detuvo, respiró hondo y dejó que su cabeza cayera hacia atrás, "No... puedo hacer esto", susurró para sí mismo, sus pies se volvían más fríos con cada segundo que pasaba. No se había puesto ni los calcetines antes de dirigirse ahí.

Suspiró, tratando de recordar lo que Wheein le había aconsejado.

"Necesito que te concentres. Concéntrate en el poder que fluye por tus venas. Concéntrate en la sensación de chispas en las yemas de tus dedos. Intenta ver tu poder".

Taehyung exhaló, concentrándose en la sensación de su poder recorriendo su cuerpo, esperando que sucediera algo.

Nada.

"Sé que estás asustado. Tal vez incluso aterrorizado. Pero para controlarlo, no puedes dejar que tus emociones te dominen. Trata de ignorar el miedo, la ira o lo que sea que estés sintiendo en este momento. Concéntrate en tu poder."

Sus manos se apretaron en puños, porque se dio cuenta del por qué no había podido usar su poder.

Sus poderes no habían desaparecido.

Nunca se fueron.

"No estás creyendo en ti mismo, Taehyung. ¿Pero recuerdas lo que fuiste capaz de hacer? Me derrotaste. Derrotaste a una reina, siendo alguien que descubrió sus poderes hace solo unos días. Eres muy fuerte".

Resopló un poco, tronándose el cuello.

"No tengas miedo de tu propio poder. Eres capaz de poseer agua y puede ser peligrosa, es por eso que tienes que aprender a controlarla. E incluso eres capaz de hacer algo que nunca antes había visto. No puedo enseñarte cómo controlarlo completamente, pero si al menos puedes manejar tus poderes de agua, entonces ya has dado un gran paso adelante".

Taehyung era poderoso. Siempre lo ha sido.

Pero la repentina sensación de vacío le había hecho dejar de creer en sus poderes. No creía en sí mismo.

Ni siquiera había intentado usar sus poderes... más de una vez. Y estaba asustado en aquel momento.

Asustado de que su alma gemela fuera a pelear contra Namjoon otra vez.

Wheein le dijo antes que nunca debe dejar que sus emociones lo superen. Para poder controlar sus poderes, tenía que estar emocionalmente estable.

Y no lo estaba en aquel momento. Taehyung no estuvo bien durante la última semana, es por eso que no había podido usar sus poderes.

"Hey, bebé, lo harás muy bien, ¿de acuerdo? No te preocupes por nada y solo concéntrate en controlar tu poder, porque eso es lo más importante de todo esto. No necesitas ser tan fuerte como Wheein. Eres más poderoso de lo que crees que eres si lo tienes bajo control".

Control.

Él era el que tenía el control de sus poderes, no al revés.

Taehyung cerró los ojos, y en poco tiempo encontró la chispa. Él lo controló.

Comenzó con la leve sensación de energía en la punta de sus dedos y sonrió levemente. Calmando su respiración y enfocándose únicamente en los destellos que se intensificaban en sus manos, combinados con una calidez reconfortante, exhaló con alivio.

"Te amo".

Taehyung sonrió levemente, su corazón se calentó ante el recuerdo, los destellos lo envolvieron por completo, casi haciéndolo sentir como si estuviera flotando, mientras recordaba sus momentos favoritos que sucedieron en los últimos meses.

"¿Qué quieres decir? Soy humano".

TaeHyung sonrió más, sabía desde el principio que Jungkook solo le estaba mintiendo en ese entonces. Era obvio.

"Eres mi alma gemela... yo... casi no te traigo conmigo".

Su corazón latió más rápido ante el recuerdo; el shock mezclado con felicidad se presentó en su interior, mientras unas gotas de agua caían de sus manos.

"¡Tuvimos nuestro primer beso en la luna! ¡Eso es tan romántico!"

Taehyung continuó sonriendo, abriendo los ojos, justo cuando formaba un pequeño corazón: el agua bailaba sobre su palma.

Lo había logrado.

Sus poderes habían regresado.

El castaño soltó una carcajada de alivio, intentando formar una ola una vez más y consiguiéndolo.

El agua se estrelló contra las paredes de la sala de entrenamiento, haciendo que Taehyung sonriera ampliamente, corriendo por el lugar mientras disparaba esferas de agua al azar, congelándo algunas para formar armas y enviarlas directamente a las paredes.

Una luz plateada comenzó a brillar alrededor de su cuerpo, sus ojos brillaban intensamente del mismo color, su cabello lentamente cambiando a su anterior tono gris. Pero él no se dio cuenta de ello.

Taehyung estaba tan inmerso en sus poderes y la repentina felicidad dentro de él, que ni siquiera le importó que su vista comenzara a nublarse.

Continuó formando olas y disparando hielo a través de la habitación, hasta que sus piernas comenzaron a temblar. Se llevó las manos a la cabeza por el dolor que se intensificaba.

"Mierda...", susurró y se arrodilló cerrando fuertemente los ojos. "Demasiado... es demasiado.", se dijo a sí mismo, hasta que su cuerpo se desplomó al suelo inconsciente.