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06; The Women Of The Hour

Ciertamente las misiones encubierto no eran las más comunes que se daban, a veces simplemente tenían que pasar desapercibido al seguir a un sospechoso, o simplemente para no llamar la atención de la prensa y la guardia civil. Pero esta ocasión en específico, tenían que conseguir la mayor información posible de uno de los multimillonarios más sospechoso hasta ahora.

Los que llevaban a cabo la misión en cubierto eran Chamber y Phi, una de las parejas casi perfectas de la organización, se coordinaban demasiado bien y, ciertamente se podía decir que se podían leer la mente.

La misión se daba en Dubai, ambos agentes estaban subiendo un ascensor de alta clase para llegar a una de las fiestas que daba dicho sospechoso. Los dos se estaban arreglando los últimos detalles, Phi un poco su cabello y estaba rociandose un poco de perfume, y Chamber con su camisa y su corbata.

—Phi, recuerda, no es al nivel de querer llevarlo directamente a la cama, solo trata de que te enseñe o te diga en donde es que esconde a sus científicos, y si logramos dar con ellos, otra organización de radianita ilegal se va al pozo.—dijo Cypher por el comunicador mientras se encontraba en otra estancia.

—Claro, claro... Seducir hombres no es lo mío pero, intentaré.—dijo Phi con algo de nerviosismo.

—¿No es lo tuyo, y como es que siempre me vuelves loco?—dijo Chamber en broma mientras se arreglaba la corbata y soltaba una pequeña risa.

Se ganó una mirada amenazante de Phi, mientras que la mujer rió levemente y negaba con la cabeza.

Estaban a punto de llegar cuando Phi, dio un vistazo rápido a la camisa de Chamber, se paró en frente de él y terminó de arreglarle su corbata junto con otros accesorios que cargaba.

—Gracias, Phi.—dijo Chamber mientras observaba a la mujer.

—Nada, Chamby.—contestó Phi mientras alzaba la vista para ver el nivel del piso.

—¿Qué te he dicho de llamarme así?—dijo Chamber con una leve sonrisa mientras observaba a Phi.

En cambio, ella soltó un suspiro, y activó uno de sus switches internos, ahora, siendo un poco más coqueta de lo que suele ser. Pasó su mano por la mandíbula de Chamber, y con su dedo pulgar, pasó igualmente por la comisura de sus labios.

—Es que me encanta verte enojado cuando te llamo así.—dijo con una voz algo más elegante de lo que suele tener. Y antes de que Chamber contestara, el elevador se abrió, y la mujer empezó a caminar hacia afuera para continuar con su misión.

Cada día asombraba más a Chamber, y cada día se ganaba más su corazón de lo que ya lo tiene ganado.

Cada uno tomó su camino, Phi siendo una de las mujeres más bellas del lugar y Chamber uno de los más arreglados y elegantes de la fiesta. Casi que al salir del elevador, la mujer ya se había ganado unas miradas masculinas, despertando el instinto varonil de los hombres que la observaban.

El plan era el siguiente, Phi debía de seducir al hombre sospechoso, debía de poder controlar sus deseos y tal para poder quitarle de encima un pendrive que contenía direcciones, números, nombres y mucho más de sus compradores y exportaciones ilegales.

Por su lado, Chamber debía de entrar de alguna forma a la oficina del señor, y desde su computadora, debía de extraer esa información a un nuevo pendrive. Dicha información contenía direcciones y palabras claves de los camiones y barcos de exportación ilegal, que fácilmente con coordinación podrían asaltar a uno, y tener esa radianita de vuelta.

—Phi, a tus en punto.—dijo Cypher mientras observaba por la cámara del arete de Phi.

Ella hizo caso, y pudo ver al hombre al que debía de encantar, pero nomás el hombre la vio, ya la hizo. Phi se transformó por completo, y volvió a su semblante seductor y coqueto que necesitaba. La música sonaba y sonaba, eran bachatas en concreto. Phi al tener ya los ojos del hombre, de un mesero tomó una copa de champán, y empezó a bailar levemente mientras se encaminaba a la ventana, y tomaba de este.