Mi luz en la oscuridad || Harry Potter

VIII

Amelia

—Harry, dijiste que iba a lograr descifrar la clave y sabrías la respuesta

—Sí, pero aun no logro entender la pista que contiene el huevo.

—Debes de darte prisa, faltan muy poco para la prueba.

—Tal vez podría preguntarle a Cedric, supongo que él ya la descifro.

—No sé si ya lo descifro, pero preguntarle no suena una mala idea, después de todo tú le dijiste lo de los dragones, supongo que si sabe algo te lo dirá, mientras sigue intentando descifrarla.

—Sí, eso haré, tal vez puedas ayudarme.

—Ahora tengo cosas que hacer, ¿te parece si luego nos vemos en la sala común?

—Por supuesto, nos vemos allá.—Me despedí de él con un casto beso y de dirigí a el lugar en donde quedé de verme con Draco.

—Llegaste justo a tiempo, tengo algo que mostrarte.—Dice tomando mi mano y guiándome rápidamente por los pasillos de Hogwarts.

—Draco, es una pared.—Digo señalando el lugar.

—En eso te equivocas, es más que eso. Cierra los ojos y piensa en un lugar que quieras.—Menciona emocionado.

—Está bien.—Dicho esto cerré los ojos y pensé en mi antigua habitación muggle.

—Ya puedes abrir los ojos.—Le hice caso a Draco y lo siguiente que vi fue una gran puerta en la pared que anteriormente no tenía nada.—Ven, hay que entrar.

Cuando Draco abrió la puerta me sorprendí con lo que se encontraba en el interior, pues era una réplica exacta de mi habitación.

—¿Qué se supone que es esto?—Pregunta.

—Es mi habitación, la que tengo con mi familia muggle.—Corrí en dirección a la cama, la cual se sentía igual de cómoda, pude ver como Draco estaba parado al final de esta.—Ven.—Tomé su mano y lo hice subir a la cama.

—¿Qué se supone que hacemos?—Dice extrañado.

—Solo hay que divertirnos.—Le digo comenzando a saltar en la cama.

Él solo me seguía mirando extrañado, así que decidí tomar su mano y hacerlo saltar levemente, pasaron unos minutos para que se comenzará a brincar aún más, incluso podía ver que se divertía por la acción. Unos minutos después decidí tomar una de las almohadas que estaban cerca y comencé a pegarle a Draco, quien imitó mi acción, así fue como comenzamos a "pelear".

En la habitación solo se escuchaban nuestras risas, y por un momento olvidé lo que pasaba fuera de esa habitación, solo éramos Draco y yo, y de no ser por la historia que nos perseguía podría estar segura de que esa situación sería un día común en nuestras vidas, y no solo lo consideraríamos como un escape.

Estábamos "peleando" hasta que sentí que iba a caer y mi reflejo fue tomar la mano de Draco, aunque eso no sirvió de mucho pues después de eso ambos nos encontramos tirados en el suelo riendo de lo ocurrido.

Estuvimos ahí por un buen tiempo, realmente disfrutaba pasar tiempo con Draco, y él había confesado que también disfrutaba estar conmigo ya que parecía ser la única persona que lo conocía.

Draco y yo salimos del lugar y nos despedimos, ya que él tenía cosas que hacer y yo tenía que ir a la sala común.

—Hola.—Saludo a Harry, quien venía saliendo de la sala común.

—Hola, ya sé cómo es que puedo descifrar la nueva pista, Cedric me lo dijo.

—¿Cómo lo harás?