IV

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Amelia

—Hola.—Saludo a Draco mientras tomaba asiento a su lado, ambos nos encontrábamos en la biblioteca.—Tú y yo tenemos que hablar.

Solo quería saber cómo es qué tan rápido había descubierto que Harry y yo éramos novios.

—Disculpa, ¿te conozco?—Dice sin despegar su vista del libro.

—Vamos, no es gracioso, sabes de qué quiero hablar.

—Bien, bien, puedes hacer preguntas y yo las contestaré.

—Sí no contestas con sinceridad le diré a tu madre que te encontré con Pans...

—¡Está bien!... con sinceridad.

—¿Cómo lo sabes?

—Cuando nos encontramos en el torneo fue aún más obvio, y yo sabía que te gustaba, por lo que fácilmente pude sacar mis conclusiones, el comentario que hice solo fue para comprobar si mi teoría era verdadera y he de decir que por la manera en que reaccionaste comprobé mi teoría.—Dice con una sonrisa triunfal.

—Eres como el siguiente Sherlock Holmes.

—¿Quién?—Pregunta.

—Olvídalo, te veo más tarde.—Digo despidiéndome de él con un beso en la mejilla

—Claro, cámbiame por cara rajada.—Dice en un tono dramático que me hizo reír.

Salí de la biblioteca, mi destino principal era el gran comedor, ya que ahí vería a los chicos, pero en mi camino me encontré con Harry.

—Hola, Harry ¿podemos hablar?

—Claro.—Menciona mientras avanzamos en dirección a la sala común.

—La profesora McGonagall me comentó que va a ver un baile de Navidad.

—No nos ha dicho nada.—Menciona refiriéndose a los campeones.

—No, lo que pasa es que yo estoy ayudando a organizarlo.

—Oye eso es bueno.—Dice sonriente.—El otro día vi que Cedric se acercó a hablarte.

—¿Celoso Potter?—Digo molestando.

Él no contestó, parecía estar pensando su respuesta, por lo que no pude evitar reírme.

—Oye, no te rías.

—Perdón, Cedric es mi amigo.

—Sí, no quería sonar posesivo o algo parecido, solo que no sabía que eran amigos. Volviendo al tema del baile, ¿quieres ir al baile conmigo? Sé que es apresurado, no me tienes que responder ahora, solo piénsalo.—Dice nervioso mientras entrabamos en la sala común.

—Me gustaría ir contigo.—Digo tomando sus manos.

Harry tomó ambas de mis manos en una suya y la otra la dirigió a mi mejilla, ambos nos acercamos y nos besamos.

—¡Oh! Nosotros no... ammm... nosotros...—Menciona Hermione intentando armar una frase coherente que decir. Ron solamente estaba en shock dirigiendo su vista a Harry y luego a mí.

—Creo que es tiempo de decirles.—Le susurro a Harry.

—Si, creo que sí.—Susurra.—Bueno, somos novios.—Dice entrelazando su mano con la mía.

—¿Qué? ¿Desde cuándo?—Pregunta Hermione.

—Desde el verano.—Contesto.

—¿Por qué no sabíamos de esto? ¿Quién más sabe?

Mi luz en la oscuridad || Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora