Happy [Kookmin Au] 📘

vii

Ahí están, la felicidad en su propio mundo mientras la tristeza lo observa escondido a la distancia.

Jungkook es capaz de entender la situación de inmediato y también logra darle sentido al "Noooo" que grito el omega hace solo instantes logrando que todos sus instintos de protección se activaran al mismo tiempo y básicamente corriera en su dirección.

Jimin encontró un gatito abandonado, por su olor Jungkook es capaz de percibir la tristeza en el omega quien justo ahora se encuentra dándole la espalda.

Tal vez porque comienza a sentirse un acosador, tal vez porque tiene ganas de ver su sonrisa una vez más, no importa cual sea el motivo Jungkook sale de su escondite y camina con tranquilidad hacía el omega como si nada estuviese pasando.

—Nos volvemos a encontrar.

Pronuncia el alfa en un tono de voz muy delicado para no espantar al lindo omega con su repentina aparición mientras se pone de cuclillas junto al chico que esta en la misma posición, observa detalladamente cada pestaña de Jimin en cuanto gira su rostro y lo mira fijamente sin siquiera parpadear, realmente se pregunta como es que el chico puede estar todo el tiempo sonriendo, no le molesta, todo lo contrario, desde el primer momento cree que tiene una sonrisa encantadora.

Jungkook siente a su lobo aullando de felicidad en su interior...realmente tiene un gran capricho con este omega, básicamente le esta pidiendo a gritos que lo toque, tal vez es para hacer callar a su estúpida parte lobo o tal vez sea porque realmente tiene ganas de tocar ese pelo lacio completamente negro desde la primera vez que lo vio, la verdad no le interesa saber el motivo por el cual justo ahora se encuentra acariciando el cabello del omega como si lo conociera de toda su vida.

—Abuelita, abuelita.

En cuanto esas palabras salen de los labios de Jimin, el alfa sabe perfectamente que el chico planea iniciar la conversación de la misma forma de siempre...con un chiste.

—¿Qué?

Pregunta en ese mismo de tono voz delicado que se asemeja demasiado a un susurro pero no alcanza a serlo.

—¿Me mostras ese pie que mamá dice que ya tenes en el cementerio?

Una risa escapa del cuerpo de Jungkook, bien tiene que admitir que si estuvo bueno esta vez.

—Te superaste.

Afirma en voz alta logrando que el lindo omega coloque una sonrisa de satisfacción en sus labios.

—Diría que te hice reír cinco veces en un día pero ya son más de las doce de la noche así que cuenta como una risa de hoy.

—¿Contas la cantidad de veces que me haces reír?

Pregunta Jungkook perplejo ante las palabras de Jimin, sigue acariciando su pelo con tranquilidad sin intención alguna de parar.

—Estuve meses tratando de hacer reír, obviamente las cuento.

Responde Jimin como si se tratase de lo más obvio del mundo.

—¿Por qué gritaste? Creí que algo malo estaba pasando, me asuste.

Pronuncia Jungkook para finalmente sacar la mano del cabello de Jimin quien levanta su rostro para observarlo fijamente, se encuentran a solo centímetros, tan cerca que un solo movimiento más podría lograr que sus narices se rocen.

Jungkook siente su lobo aullando de felicidad en su pecho, siente como algo en él le pide que bese al omega, sus manos pican por tocarlo y aún así se queda estático, tal vez aterrado de que vuelvan a lastimarlo, tal vez porque una parte de su corazón sigue pertenciéndole al Mark que una vez conoció, tal vez porque no se siente listo para enfrentar el amor una vez más.