DEJAME PROTEGERTE

El banco

Un nuevo día comenzaba en la ciudad de piltover, nuestras protagonistas se preparaban para ir de nuevo al trabajo, las dos estaban impacientes por llegar y ver a la otra, aunque igual estaban nerviosas por la despedida que se habían dado la noche anterior, porque, aunque un beso en la mejilla no parece nada por lo cual alarmarse, para ellas era muy diferente. La primera en llegar fue la sheriff como de costumbre, ya se encontraba en su oficina revisando papeles cuando empezó a escuchar un jaleo que venía de afuera de la comisaria.

Asomándose por la ventana pudo ver como había varios reporteros que habían detenido a VI antes de entrar a la comisaria, así que se dio camino hacia la puerta para salvarla de ellos, ya que lo reporteros podrían seguir y seguir haciendo preguntas hasta cansarse.

Reportero 1: señorita VI, se siente usted capaz de afrontar a los criminales que asolan piltover.

VI: lo hacía antes de ser parte de la comisaria, puedo seguir haciéndolo ahora con una placa de por medio.

Reportero 2: señorita VI tiene usted alguna pareja sentimental?

VI: eeeehhhh... no, siguiente pregunta.

Reportero 3: como ejecutora de la sheriff, parte de sus deberes es protegerla, ¿hasta donde llegaría por cumplir con ello?

VI: haría lo que fuera, no solo es la sheriff y yo su ejecutora, es mi amiga, y la única persona que creyó en mi a pesar de que todo estaba en mi contra, ella es muy importante para mí, sería capaz de dar mi vida por la de ella si tuviera que hacerlo.

La sheriff que ya estaba en la puerta de la comisaria, pudo escuchar claramente las palabras de la peli rosa, esas palabras tocaron muy dentro de su corazón, el saber que tan importante era para VI la ponía muy feliz, que no podía evitar sonreír.

La peli rosa sintió que alguien la observaba desde su espalda, al voltear vio a la sheriff parada en la puerta de la comisaria viéndola y sonriendo, se notaba la felicidad en ella, VI no sabía si la sheriff había escuchado lo que había dicho apenas hace unos momentos, eso la ponía un poco apenada.

VI: bueno, fue un gusto hablar con ustedes, pero tengo que ir a trabajar, ya me están esperando.

VI se dirigió hacia la sheriff a un paso apresurado dejando atrás a los reporteros que seguían lanzando preguntas.

VI: buenos días cupcake.

Caitlyn: parece que te has vuelto popular.

VI: y que lo digas, todos fueron muy amables el día de hoy, no estoy acostumbrada a eso, fue raro.

Caitlyn: bueno vamos a la oficina.

Ya en la oficina

VI: ¿cuánto tiempo estuviste parada en la puerta?

Caitlyn: el suficiente.

Vi estaba apenada de que ahora era aún más probable que haya escuchado lo que había dicho.

Caitlyn: eso que dijiste, sobre mí, ¿es verdad?

La voz de la sheriff temblaba un poco, aunque ya lo había escuchado, quería que la peli rosa lo dijera de nuevo estando a solas, solo quería oírlo.

VI: no sé a qué te refieres cupcake.

La sheriff mostro una cara de decepción ante las palabras de VI, a lo que VI se dio cuenta rápidamente, así que se acercó a la sheriff, tomo su mano y la miro directamente a los ojos de forma seria, sorprendiendo a la sheriff.

VI: cupcake, eres lo más importante para mí, nunca dejaría que alguien te haga daño, te protegeré con mi vida si es necesario.

La sheriff quedo completamente sorprendida, sus ojos se abrieron mucho al escuchar las palabras de VI, su corazón empezó a latir muy fuerte, trago saliva del nerviosismo que ahora sentía, algo dentro de su estómago parecía revolotear, el estar con VI siempre la hacía sentir protegida, la sheriff impulsivamente se acercó más a VI y la abrazo fuertemente, VI podía sentir el cuerpo de la sheriff pegado al suyo, su calor y sus tiernas manos, su dulce aroma que la embriagaba, la peli rosa le devolvió el abrazo.