Into You › Yoontae

OO4

Para el lunes, Taehyung ya tenía programada una cita con Yoongi.

Toda la gente en la fiesta había visto la gran 'conexión' que éstos dos jóvenes habían tenido, y todos habían quedado enamorados por la linda pareja que harían. Todos habían quedado convencidos.

Todos menos Seokjin.

El Alfa amigo del rubio sólo había fruncido el ceño y apretado la mandíbula hasta el punto de oírla tronar. Su madre le acarició la pierna y le susurró un suave "ya llegará tu omega, él es lindo, pero ya vimos que no es para ti", Seokjin quiso reír a carcajadas ante eso, pero sólo sonrió y agachó la mirada.

Entonces, el lunes se acercó a su amigo con cara de pocos amigos y gruñó haciéndolo brincar.

—No me digas que de pronto quieres a un alfa. — Taehyung lo miró y mordió su labio.

—Tú no entiendes nada. —susurró.

—Te vendieron con la familia Min, ¿verdad? —preguntó Seokjin.

—No.

—¿Entonces?

—No preguntes, Jin.

—Sólo quiero saber por qué de pronto tienes interés en los alfas.

—¿Por qué siquiera te importa?

—Te dije que yo podía ayudarte.

—Y yo te dije que no.

—¡Lo sé! Lo sé y por eso estoy enojado.

Taehyung quiso brincar de alegría pero no estaba seguro de qué significaban esas palabras, así que sólo sonrió.

—No estés molesto—susurró tomando la mano de Seokjin, como siempre lo hacía—, tú siempre serás mi alfa favorito.

— Taehyung. —escuchó y soltó rápido la mano de Seokjin.

Yoongi estaba parado frente a ellos con el ceño fruncido y las manos hechas puños.

Taehyung estaba asustado.

Seokjin no.

—Oh... Yoongi, hola...—jadeó y miró a Seokjin con su labio entre sus dientes—, seguro ya se conocen—susurró. Jin asintió con la mandíbula apretada.

—Lo conozco.

—Un placer verte, Seokjin. —dijo con una sonrisa. Jin tuvo el impulso de rodar los ojos y tomar a Taehyung bajo su brazo.

—Igualmente.

—Bueno, lamento hacer esto pero Taehyung y yo debemos irnos—dijo tomando al rubio por la cintura.

Taehyung se tensó y miró a Seokjin alarmado.

Seokjin frunció el ceño y se acercó lentamente al ojiazul.

—¿Tú estás seguro?—le susurró, Taehyung mordió su labio y lo miró suplicante.

Seokjin entendió que no tenía opción. A veces –siempre– odiaba a los padres de Taehyung, siempre le dijeron que omega era sinónimo de sumisión y Taehyung, aunque intentó hacer caso omiso a ello, se comportaba sumiso, y eso jodía a Seokjin. Dios, su amigo merecía algo más, no un muchacho rico con aire de grandeza y nada de amabilidad en su manera de hablar. Taehyung merecía alguien que lo quisiera por lo que es, no por su estado.

—Cuídate demasiado. —le dijo, Taehyung asintió.

—Para eso estoy yo. —interrumpió Yoongi, Seokjin lo miró.

—Los omegas no necesitan un alfa para cuidarse.

—Lo sé. —atinó Yoongi. —, pero quiero hacerlo.

Luego de despedirse, Taehyung y Yoongi caminaron al auto del mayor y subieron, sin decir una sola palabra.

El rubio miraba por la ventana y suspiraba de vez en cuando, mientras que Yoongi manejaba sin despegar la vista del camino.

—¿Cómo te fue en la escuela?—dijo Yoongi decidiendo romper el silencio.

—Bien, supongo.

—Veo que te hiciste muy amigo de Seokjin.

—Sí, él... es buena persona—susurró mordiendo su labio.

Él creía que Yoongi estaba enterado de todo, del hecho de que era hijo de Kyu Suk  y no de su hermana, pero al parecer se equivocó.

—Mmh... no he tenido la oportunidad de crear conversación con él.

—Deberías. Es muy inteligente, siempre sabe algo sobre todos los temas.

El silencio reinó el automóvil y Taehyung siguió mirando a la ventana.

—¿Te gusta?—escuchó, y lo miró por primera vez en todo el trayecto.

Taehyung entró en pánico pero intentó relajarse cuando comenzó a oler las hormonas en el aire.

Seokjin le gustaba un poco pero era su mejor amigo, y además ahora estaba apartado para él.

—No. —susurró.

—A mí me parece lo contrario.

—En serio, que no me gusta.

—Yo creo que a él le gustas.

Taehyung rió.

—No le gusto y no me gusta.

—Soy Alfa, Taehyung. Sé exactamente cómo se comporta un Alfa frente a un Omega que le gusta, y él actúa como Alfa interesado en un Omega.

Taehyung no respondió. No quería aceptarlo, no porque Yoongi nunca se fijaría en él de esa forma y no estaba dispuesto a ilusionarse. No más.

—Él y yo actuamos de la misma forma contigo—finalizó.

—Yoonxtaem