En este one shot Bruce no es batman ni Edward es el acertijo muejejeje
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Fue aproximadamente hace dos meses, durante una de mis tantas guardias nocturnas. Un hábito que desarrollé gracias a mi insomnio y las pesadillas que me levantan por las madrugadas. Todas las noches salgo en mi moto a dar vueltas por la ciudad viendo si puedo ayudar a alguien sin arriesgarme tanto, quizás una paliza y alguno que otro moretón.
-Joven Wayne no puede hacer eso, se está arriesgando no sólo al que dirán si no también a ser otra víctima de la ciudad. - Esa noche Alfred sostenía mis hombros firmemente y me sostuvo la mirada esperando alguna respuesta. Le mentí diciendo que ya no saldría hasta tan tarde pero actualmente parece que se resignó y solo me espera hasta la madrugada con el baño listo y comida.
Una noche cualquiera de mis vigilancias escuche un grito ahogado de dolor que provenía de un callejón, me la pensé en ir pero me decidí cuando escuche un golpe y otro grito débil.
Me acerque silenciosamente para examinar la situación, no era algo tan arriesgado, solo dos tipos aproximadamente más jóvenes que yo golpeando a otro que estaba en el suelo, posiblemente lo estarían asaltando. Pensé en llamar a la policía como lo hacía siempre en estas situaciones pero esa opcion desapareció cuando uno de ellos alerto al otro de mi presencia.
-Ahí. - dijo uno de ellos señalando a mi dirección. - Creo que hay alguien allí.-claro que no podía verme con claridad, el callejón estaba alumbrado por la tenue contraluz de una cafetería que daba a mi espalda.
Me acerque rápidamente a ellos, atacando de sorpresa, tomé un hierro que estaba tirado ahí y comencé a golpearlos con este, no los logre atrapar pero si logre hacer que huyeran.
Regrese mi mirada a la víctima, el chico todavía estaba en el suelo, no se veía herido de gravedad, sin embargo no estaba seguro por la poca luz.
Un leve sollozo se escucho. El estaba llorando, entre en alerta quizás si podría tener alguna herida comencé a buscar algún indicio de una a puñalada o una contusión severa con la mirada pero lo que era un leve llanto se transformó en un mar de lágrimas bajando por su rostro acompañado de unos jadeos, intento de llorar en silencio quizás.
No pude evitar sentirme incómodo, ¿que debía hacer en esas situaciones?, ¿debería consolarlo quizás?, No tuve tiempo de seguir pensando ya que el chico se levantó de golpe asutandome un poco.
-Gracias. - Dijo con un hilo de voz mientras trataba de regular su respiración, parecía estar agitado por algo tan simple como llorar.
Lo detuve hagarrandole del brazo, necesitaba saber si estaba herido o al menos la razón de su llanto.
-Que sucede?. - volteo a verme desconcertado, podía ver aún restos de miedo en sus ojos, supongo que ver a un encapuchado sucio no era la imagen más reconfortante después de ser violentado. - quieres que te pague?, lo siento ellos se llevaron.- hizo una pausa en seco para contener su llanto.- se llevaron todo lo que tenía.
-Necesito ver si estas herido.- Estaba diciendo una verdad a medias, una parte de mi sentía que si dejaba ir a ese chico algo malo sucedería, como si el mundo dependiera de quedarme con él.
Sin decir nada se acercó a mí y se quedó quieto mientras yo revisaba por todo su cuerpo. Primero le quite su gran chaqueta que estorbaba a la vista y comencé a tocar levemente sus brazos y su torzo en búsqueda de alguna fisura en su helada piel. El no dejaba de sacar pequeños sollozos, yo quería entender el porqué de su llanto.
Sujete su cara entre mis manos y hable. - Deja de llorar.- mi voz sono más demandante de lo que pensé, lo cual provocó el efecto cobrarío. El chico comenzó a disciplarse mientras se hacían presentes más lágrimas en sus ojos.
-Perdón es solo que, trabaje mucho por eso y ahora no se que hacer, se suponía que ese dinero me ayudaría a pagar la renta de este mes pero ya no tengo nada.- Impulsivamente tome su delgado cuerpo entre mis brazos y le di un abrazo.- y rompieron mis lentes.
Lo sostuve hasta que su llanto se fue calmando para quedar en solo una leve respiración irregular.
-Lamento no haberlos detenido.- me sentía deberás apenado, si hubiera actuado más rápido le habría ahorrado muchos problemas y las lágrimas.
Este me vio y negó con la cabeza. -solo tenía doscientos dólares pero me estaban pidiendo más, si tú no hubieras llegado posiblemente me habrían matado a patadas.
Se quedó viéndome fijamente por unos segundos para después conducir sus manos a mi cara y tocar un poco de la sombra corrida de mis ojos. -Muchas gracias chico murciélago.
Se soltó de mi hagarre y se dispuso a caminar en dirección a la cafetería de enfrente, acción que imite. Sentía que si me quedaba con él esa noche algo terrible se evitaria.
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