· One shots // Roger Taylor y tú ·

Letters

Aclaración: Esto es algo diferente que me moría por hacer, y será bastante largo.

31 de marzo de 1974

"Querido rubio,

antes que nada, he de decir que no recuerdo su nombre, por lo que si no me lo recuerda usted, le llamaré "rubio". Bonito apodo, ¿no es así? 

Trabajo como camarógrafa en The Rainbow y he podido estar presente en la actuación que usted y sus increíbles compañeros de banda han realizado esta noche. Estuve observándolo durante todo el concierto, pero no se asuste, no soy una acosadora. Le observaba porque me fascinaban sus movimientos, como usted logra deshacerse de sus problemas golpeando tambores y platillos. Le admiro, rubio. 

Quisiera yo poder deshacerme de mis problemas, pero realmente cuesta encontrar algo o alguien para hacerlo. 

Sus ojos me llamaron la atención. No concuerdan con lo que usted transmite con el resto de su cuerpo, el cual transmite ira y enojo. Sus ojos transmiten paz y tranquilidad, y me resultó realmente grato poder observarlos, más cuando su mirada se cruzó con la mía.

No sé si responderá a esta carta, no sé siquiera si llegará hasta sus manos, pero me conformo con saber que en algún momento nuestras miradas se cruzaron.

Con cariño, sin nombre."

— Dios, Roger, esa chica es una verdadera fangirl. — Comentó Freddie tras leer la carta sin nombre que encontró el rubio dentro de la taquilla de su camerino en The Rainbow. El menor no le prestaba atención, simplemente miraba al suelo con la mirada desenfocada. Reconocía que esas palabras fueron las más hermosas que alguna vez había recibido y que, se había emocionado la primera vez que leyó aquella carta. — Incluso te trata de usted, qué fina. — Carcajeó el persa.

El ojizarco continuaba en su mundo. Aquella chica mencionaba en su escrito que habían cruzado miradas, pero lamentablemente era muy difícil recordar los rostros de las personas que se encontraban en el público. Por lo que no tenía ni idea de quien sería aquella educada chica que se había limitado a escribir una bella carta en lugar de entrometerse en el espacio personal del chico.

— ¿Rog? — La voz - esta vez más alta - de Freddie, lo sacó de su trance. — Despierta, rubia. — Chasqueó los dedos frente a los ojos del batería. 

— Lo siento, ¿qué decías? — Dijo quitándole la carta al persa y guardándola de nuevo en su taquilla.

— Que esa chica es una verdadera fangirl. — Carcajeó como lo había hecho anteriormente. Roger, quien se encontraba sentado, se levantó para colocarse a la altura de Freddie.

— No, Freddie, no es como las fangirls. Esta chica es una puta genia con cabeza que ha decidido mandarme una puta carta en vez de invadir mi puta privacidad. — Recalcó algo molesto por la actitud de su amigo, el cual alzó ambas manos en señal de paz, haciendo así que el rubio se alejara.

— Calma. 

— Me gusta que me trate de usted, es respetuosa y además, ni siquiera ha dicho su nombre. Es inteligente. — Taylor volvió a sentarse en la silla blanca de plástico. — No me ha dicho algo como "eres muy guapo, Roger", de hecho ni siquiera recuerda mi nombre.