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La mañana se sintió como una recompensa

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La mañana se sintió como una recompensa. Fue la primera vez de todas las que habíamos dormido juntos en las que Adelheid no se despertó primero que yo. Me sentí culpable viéndola dormida a mi lado, se suponía que estaba recuperándose. Me pregunté de donde sacaba tanta energía.

Estando dormida parecía como si tuviera mucho en la cabeza, como si en sus sueños planeara cómo organizar su día. No quise despertarla porque parecía ocupada, seguí observándola por un rato mientras le consentía las mejillas. Se veía seria incluso en su sueño. Me pregunté si podría hacerla reír todos cada vez que hablara pero luego pensé que ella era así de alguna forma y no podría cambiar eso. Lo descubriría.

Tras de un rato se despertó y tan pronto como lo hizo pretendi estar dormido.

– Se que estás despierto - Dijo sin embargo mientras bostezaba.

– Buenos dias - Dije sin dejar de pretender que estaba dormido.

– Buenos dias - Muy extrañamente ella respondió y se levantó, buscando como primera instancia su vestido en el suelo y yendo al baño. Supuse que se cepillo los dientes porque la escuché y regresó al cuarto – ¿Que? ¿Que me ves?

– ¿No puedo verte? -

– ¿Que se supone que haga? - Me preguntó de pie como si fuera un meme.

No le dije nada por lo que ella cerró las cortinas para que no entrara luz y regresó a acostarse. La abracé y ella se quedó quieta como un cubo.

"Es... bastante rara" Recordé las palabras sabias de Axej.

– Déjame amarteeee - La apreté con los brazos y ella no hizo nada – ¡Deja de estar incómoda!

– No - Sin moverse dijo antes de inflar sus mejillas de aire y ver al techo. Si era bastante rara después de todo.

Sabía que en el fondo estaba incomoda porque no estaba acostumbrada a esta clase de cercanía romántica por lo que la solté y la deje quieta un momento. Encendimos el televisor y no hablamos más, después de un rato ella buscó mi abrazo y la recibí contento.

LOVE OF THE DESIRED | arminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora