Adiós Héroe

Epílogo

En un parque se encontraba un grupo de niños que empujaban y golpeaban al otro mientras se reían, a lo lejos se encontraba un grupo de hombres observando esa escena con el ceño fruncido. Estaban a punto de acercarse para evitar que siguiera eso cuando un pequeño niño de ocho doce años de cabello azabache y profundos ojos azules, tan claros como el cielo se colocó frente al niño.

- ¡Déjenlo! Él no les ha hecho nada. – les dijo el niño mientras colocaba sus brazos a los lado para protegerlo.

El otro niño salió corriendo y el azabache sonrió al ver eso.

- Tú tomarás su lugar. – dijo otro de los niños, que parecía ser el mayor.

- No lo creo, mocoso.

Los niños giraron encontrándose con el grupo de hombres que los miraban de manera amenazante. Los pequeño salieron corrieron con temor y llorando.

- Hola, héroe.

- ¿Los conozco? – preguntó el niño inclinando su cabeza levemente con curiosidad.

- Nosotros te conocemos.

- Ha pasado tiempo, compañero.

- Es bueno verte de nuevo, jefe.

Mikey y los demás sonrieron cuando el niño lo hizo y tomó la mano que Naoto le ofrecía.

- Me llamo Hanagaki Takemichi, gracias por ayudarme.

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Cuatro años después...

Takemichi se encontraba saliendo del instituto acompañado de algunos chicos que reían a su lado.

- En serio. ¿Por qué no tienes novio o novia, Take? Eres demasiado atractivo y lindo para tu propio bien. – le dijo un pelirrojo mientras revolvía el cabello del azabache.

- Ya tengo a alguien.

- Siempre dices eso. – se quejó un rubio.

- ¡Takemicchi!

El azabache miró al frente y una hermosa sonrisa apareció en su rostro mientras corría hacía los brazos de Draken y Mikey. Ambos lo esperaban con felicidad.

- Esos viejos son las únicas personas en la vida de Takemichi. – comentó uno de los chicos, de cabello castaño.

Ellos eran sus luces y se volvieron a reencontrar después de toda la espera pudieron estar juntos.