•𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 2.

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Las siguientes clases siguieron, Jay tendría práctica de rugby, como uno de los mejores jugadores

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Las siguientes clases siguieron, Jay tendría práctica de rugby, como uno de los mejores jugadores.

—Amor! —llegó el chico cobrizo, con una enorme sonrisa, acercándose a Jake para depositar un beso en las mejillas del mismo.— no sabía que vendrías al entrenamiento de hoy...

—bueno, hoy dormiremos en casa de Jongseong, así que tuvimos que venir... —miró al Sunghoon. —aunque Hoon irá a la pista hoy ¿verdad?

—entendí esa indirecta de que me largue, pero si —Hoon sonrió.

—no entiendo como pudiste dejar de concursar, —murmuró Jay triste. —quizás algún día deberías de invitar a Riki, le encantaría verte patinar con música clásica..

—podría llevarlo ahora, si es que sigue por aquí...—Jay nego.

—debe de estar en su cita con "no me molestes, estoy con mi amado violín"...

—¿Con el cual pensabas que ganarías su confianza, pero de alguna forma lo alejaste más? —Jay asintió a lo que dijo Heeseung. — Riki es adorable —sonrió.

—mi recomendación es, si quieres morir invitalo ahora, si quieres seguir patinando no lo invites.

—La vida se trata de morir Jay... —Sunghoon sonrió despidiéndose.

Fue a su casillero, sacando sus amados Patines color platinados. Eran los patines que más amaba desde que dejó el patinaje artístico, o bueno ahora que comenzaba a verlo más como un pasatiempo.

Toda su vida se la dedico a aquella pista, eso hasta que hizo un paso en falso y terminó con una severa lesión, la cual sanó por completo, pero que aún le aterraba de sobremanera, ya que otro paso en falso y nunca más volvería a tocar el hielo.

Prefirió no someterse sobrepresión y tomarlo con calma.

En su lógica tenía sentido.

—Ri- —se cayó al escuchar el suave sonido del Violín ser esparcido por el salón de música, el cual se encontraba vació y solo el menor se encontraba.

Siguió cada uno de sus pasos, de sus finos movimientos con su mano.

La melodía finalizó, y la frívola mirada de Riki se posó sobre Sunghoon, mirándole con mucho más desagrado.

—¿no te enseñaron lo que es privacidad? —Sunghoon abrió sus ojos sorprendido.

—yo —titubeó con temor. — quería invitarte a ir a la pista de hielo conmigo, Jay me dijo que te gusta la música clásica, podr-

—no —Fue lo único que dijo para volver a postrar sus dedos sobre el fino violín. —¿no te irás?

—no será tan malo si vienes conmigo, lo prometo..

—si Jay te dijo que me gusta la música clásica, también debió decirte que no me gusta ser molestado cuando estoy practicando... y si tanta curiosidad tienes sobre mi, dejame decirte que no te quiero cerca de mi ¿entendiste?

𝗜 𝗹𝗼𝘃𝗲 𝗬𝗼𝘂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora