Dime la verdad

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Mikasa podia ver a su capitán delante de ella volando entre los arboles con su equipo bajo la luz de la una Luna llena  que los iluminaba . La rabia  y la urgencia de respuestas le urgia. Su cordura y respeto se estaba perdiendo por completo. Él recordaba más de los que le habia dicho anteriormente y a pesar de que habian acordado no hablar del tema este seguia ahi persistente en sus vidas. 

Mikasa necesitaba en el fondo de su ser  saber la verdad, era  hora de enfrentar el tema de una vez por todas, si él recordaba más  de lo que sucedio esa noche  debia contarselo a ella, despues de todo tenia tanto derecho a saberlo como él. 

Usando toda su velocidad y a pesar del fuerte dolor que esto provoco en sus costillas Mikasa se acerco a su capitán y ante la sorpresa de este  lo tomo de un brazo y puso el otro  sobre el cuello de Levi  empujandolo sobre la rama de un gran arbol.

- ¿usted lo recuerda cierto? recuerda lo que paso esa noche. Digame si de verdad sucedio algo entre nosotros cápitan por favor digamelo- dijo la chica casi como una suplica mirando a Levi directo a los ojos aflojando un poco su agarre mientras bajaba la mirada sediendo ante el fuerte dolor en el costado que empezó a sentir. 

Levi quien se mantuvo quieto por unos pocos segundos,  reacciono ante la insoburdinación  de ella, se volteo rapidamente dejandola a ella sobre la rama esta vez apretandola él con su codo  con furia y sosteniendo el cuerpo de la chica con la otra mano ignorando por completo que ella sufria fisicamente debido a sus costillas lastimadas . Se acerco a ella todo lo que pudo y a menos de 5 cm de distancia se detuvo con una cara seria y una mirada asesina: 

- ¿porque cadete? ¿eso haria alguna diferencia? ¿dejarias de mojar tus calzones por Eren si  algo hubiera sucedido esa noche entre nosotros?- escupio él con rabia. 

Mikasa perdio el valor que con su enojo  e imprudencia habia adquirido, podia sentir el aliento de su cápitan  con olor a menta y té sobre su rostro, agitado por la rabia, atravesandola con una mirada afilada y penentrante, pero sobretodo podia verlo escupiendo esas palabras con algo más que enojo, algo que ella no entendia bien. Detestaba a ese enano despreciable y odiaba no poder leerlo como leia a los demás, él siempre era mejor en todo, pensaba antes en todo, la habia dejado en evidencia con algo tan intimo como lo que en realidad Eren le hacia sentir a veces y lo odiaba por eso, no solo porque Levi era altanero, malcriado y muy prepotente sino además  porque él podia ver en ella lo que otros tal vez no podian reconocer y sin embargo, viendolo de ese modo tan cercano  algo se movio dentro del pecho de la chica y su respiración se agito de pronto dejandola sin habla. Levi era todo un hombre, las manos que la aprisionaban eran fuertes, sus facciones intachables, su expresión corporal imnotisante;   por un breve instante Mikasa pudo percibirlo mas allá de lo que lo habia hecho anteriormente y esto la sonrojo hasta las orejas.

 Este gesto para Levi no paso desapercibido en lo absoluto y cayo en cuenta de lo cerca que estaba de ella invadiendo por completo su espacio personal. Trato de alejarse pero Mikasa ante una reacción casi involuntaria  lo tomo con una de sus manos de su nuca haciendo que el cápitan no pudiera alejarse de ella y sobretodo que no pudiera apartar esos ojos azules de sus ojos grises. 

El mundo se detuvo para los dos. Podian sentir sus respiraciones sobre el rostro. Levi sintio algo que no habia sentido en muchisimo tiempo: deseo. Si bien no era ciego y sabia que la cadete era sumamente atractiva él no la habia persibido como mujer hasta el incidente de la borrachera. Muchas veces durante los entrenamientos habia visto a los otros cadetes babeando ante la fuerza, la determinación y el cuerpo de la chica. Solia ignorar eso hasta que le molestaba lo suficiente para enviar a todos a sus labores  apunta de gritos y regaños. 

Ahora viendo esos ojos grises tan de cerca y ese rostro y esas acciones que la chica hacia que no tenian explicación para él  solo  podia  sentir un deseo exhuberante brotar por cada uno de sus poros sacandolo de su habitual tranquilidad.

Resistencia AckermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora