Capítulo 13

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Unos golpes insistentes en mitad de la noche asustaron a la joven que no esperaba a nadie. Al abrir la puerta encontró un Anthony en camisa y con rostro consternado.

- Anthony - dijo confundida la chica - ¿Qué pasa? ¿estás bien?

- Elizabeth, siento mucho lo de esta noche, de verdad, no era mi intención hacerte sentir mal. Es cierto que entre Siena y yo hubo algo pero eso quedó en el pasado cuando te conocí - habló el Vizconde para hacer una pausa dubitativo - Te amo Elizabeth Holmes, amo todo de ti, desde verte bailar hasta hacer una de tus llaves. Amo tu risa, tu forma de hablar...todo. Nunca creí que podría llegar a sentir algo así pero llegaste a mi vida e hiciste que todas creencias se derrumbaran - continúo hablando pero fue callado por unos labios sobre los suyos. Por primera vez la joven había tomado la iniciativa al besarlo. Un beso dulce y cuidadoso.

- Anthony, debo de confesar que cuando llegué a Londres lo último que quería era casarme. Mi madre me crío con la idea de que el matrimonio era como si me cortaran las alas, pero cuando te conocí supe que no se refería a eso, si no que me casara de manera libre y junto a ti siento que puedo ser yo misma. Te amo Anthony, amo como cuidas de tu familia, tu competitividad, pasar tiempo juntos, tu cercanía - hablaba para hacer una pausa y mirarle a los ojos - Amo todo de ti.

Ahora fue Anthony quién la besó para guiarla hacia el interior de sus aposentos y cerrar la puerta tras de si. Sabía que al amanecer podía morir y no quería quedarse con cuentas pendientes. Sus lenguas estaban realizaban movimientos que provocaron la subida de temperatura de la habitación. Anthony no lo dudó y sentó sobre la mesa a la joven Holmes. En ese momento pudo recrearse con las vistas que tenía. Frente a él tenía la imagen de la seducción propia. Una Elizabeth sonrojada, con el pelo cayendo alrededor de su rostro y el camisón levemente torcido dejando ver uno de sus hombros. Ese espectáculo visual ocasionó que el Vizconde se endureciera.

- Anthony, bésame - pidió Elizabeth a lo que él sin pensarlo obedeció a la mujer de sus deseos. La besó mientras que ella por instinto alzo su cadera y sintió el miembro duro del hombre creando una fricción entre sus entrepiernas provocando una sensación que jamás había experimentado antes. El Bridgerton realizó un descenso de sus besos hacia el cuello de la joven. El temperatura de la joven aumentó sintiendo que las vestimentas sobraban comenzando a desabrochar la camisa de Anthony y comenzar a acariciar el torso desnudo de este lo que lo excitó aún más. El hombre de acuerdo a la joven decidió deshacerse el camisón que llevaba ella y así pudo ver el cuerpo desnudo de ella que en ese momento pudo jurar que era la reencarnación de la Diosa Afrodita, tan seductora y amorosa. Por instinto llevó su mano a sus pechos para intentar cubrir su desnudez.

- No debes de avergonzarte - le dijo Anthony tomando sus manos y quitándolas para poder apreciar mejor el cuerpo de su amada. Bajó y comenzó a besar uno de estos mientras que dejó de sujetar los brazos de ella, pudiendo ahora acariciar los pechos de la joven. Eran del tamaño perfecto para sus manos. Un leve pero seductor sonido salió de la boca de ella incitó que Anthony hiciera esos movimientos con más ímpetu arrancando más gemidos a la joven que intentaba callarlos para no ser escuchados.

Una de las manos abandonó los pechos y bajó a la intimidad de Elizabeth notando que había humedad en ella. 

- Anthony - gimió la joven cerrando un poco las piernas.

- No Vizcondesa, debe mantener sus piernas abiertas si quiere que continúe - dijo Anthony con una notoria lujuria en su voz. Abrumada por el deseo, Elizabeth abrió sus piernas para quedar expuesta frente a su futuro marido que sin esperar se arrodilló para que quedara su cara frente a la entrepierna de ella.

- ¿Qué pretendes, Anthony? - cuestionó realmente sonrojada ella, provocando ternura al Bridgerton por su inocencia y aunque supiera cómo se concebía un hijo no sabía que había más cosas que hacer con un esposo.

Descubriendo el Amor [Anthony Bridgerton]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora