Dos opuestos, enemigos naturales, como la luz y la oscuridad, se embarcan en una misión fatal para el universo, juntos y separados mientras luchan contra sus sentimientos. La bruja escarlata, destinada a destruir y generar el caos, y el hechicero S...
—Stephen, aquí estoy, tranquilo— dijo tomándolo en sus brazos y acercándolo a su pecho
—Christine por favor, no...
—Aquí estoy, fue una pesadilla, otra vez...
Strange sudaba, su corazón acelerado parecía salir por su garganta, y nuevamente, como cada noche tenía la misma pesadilla, no la recordaba, solo sabía que Christine estaba en peligro.
La doctora Christine Palmer le llevaba una taza de té a la cama y lo acariciaba hasta que volviera a la calma, trataba de convencerlo, de que solo era producto del miedo de perder a su ser amado.
—Suele pasar, yo también sueño que te pasa algo malo y yo tengo muchas razones para creer que puede suceder, eres el hechicero supremo -sonrió- constantemente te pones en peligro, deberías dejar de intentar salvar el mundo un tiempo, te está enfermando.
— Primero, no soy el hechicero supremo, es Wong, lamentablemente — dijo haciendo un gesto de resignación con una pequeña sonrisa— segundo, desde que dejé de creer que la magia era una tontería inventada por charlatanes anti ciencia, nada me parece fuera de la realidad, ese sueño se siente muy material, aterrador. Y tercero, es mi deber con la humanidad, contigo, y quizás con el universo entero. Soy doctor debería salvar vidas, juré salvar vidas a toda costa.
Christine era paciente con Strange, sabía todo lo que significaba estar a su lado, y aceptar su forma de ser, a veces sentía que todo se trataba de él, pero seguía ahí como una amiga incondicional.
— Me voy al hospital, descansa Stephen.
— Creo que saldré a tomar un café, necesito volver a ver cotidianeidad neoyorkina.
Strange dio un paseo matutino en un intento de mantener su mente pacifica, entro a su cafetería favorita y pidió un simple espresso, como de costumbre, mientras miraba por la ventana a la gente común pasar. De pronto se escuchó un estruendo y gritos despavoridos, se tocó la frente y dijo resignado "bueno café, será para otra vez¨ apareció la capa de levitación y su traje para aventurarse hacia alguna amenaza. Esta vez la causa del pánico y la destrucción era un aberrante monstruo extraterrestre con un grotesco gran ojo, Shuma-gorath un demonio de antigua fuerza del caos. Comenzó la lucha, junto a Wong lograron reducirlo pero el demonio era increíblemente fuerte, finalmente lograron derrotarlo levitando una farola que perforar su enorme ojo entre tentáculos.
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—Bueno no es la primera vez que vemos criaturas extraterrestres acá- Dijo Wong con resignación
—No... pero esta cosa es peligrosa, esta invocado, es brujería. No puede haber venido justamente aquí sin intenciones malignas, dudo que podamos manejar a lo que sea que esté detrás de esto, si es que insiste...
