Nuestro universo ScarletStrange

Solo una ducha

(Capitulo SexOso aviso💀)

— Creo que a pesar de todo lo horrible que tuve que pasar, y todo lo horrible que hice, me trajo a este momento, a ti, Stephen. Yo también haría cualquier cosa por ti, perderte no es una opción. Te amaré por siempre— dijo en voz muy baja Wanda que sentía como el corazón de su amado latía con fuerza después de declararse su amor de esa manera, ahora lo serían todo. — Esta es la parte en que me besas y me quitas la ropa Doctor Strange— se rio Wanda.

— ¡Ah! Lo siento cariño. Estaba pensando en que quiero ir a darme una ducha— la miró coqueto.

— Amm... que coincidencia yo estaba pensando lo mismo. Creo que tendremos que compartirla—dijo Wanda respondiendo a su coqueteo y tomándole la mano para guiarlo a la ducha.

La bruja tiraba de su brazo delante de el, pero antes de llegar Stephen la volteó hacia el y la besó con descaro, no le importó enredar la cabellera pelirroja de su novia. La apretó tan fuerte contra el que casi la deja sin respiración, pero quería sentir su lindo cuerpo desnudo, así que le quitó la blusa de un tirón.

— Luego la arreglo— dijo casi sin abrir la boca que estaba pegada a los labios húmedos de Wanda.— no podía esperar 2 segundos por botón.

— Hazlo con toda mi ropa si quieres— respondió también con la voz entre cortada por los besos.

Ella le quitó la camisa en un segundo usando magia. Ambos sonrieron "porqué no se me ocurrió" dijo Strange. "Porque no te dejo pensar, Stephen Strange". El hechicero soltó su boca y le besó el cuello bajando hacia los grandes y contorneados pechos de su novia que llevaba presionando contra el, lo excitó de sobremanera y comenzó a lamerlos y apretarlos con sus manos. Parecía como si Strange hiciera magia con ella, cualquier contacto por mínimo que tenían hacía a la bruja hundirse en escalofríos.

— Como lo— gimió Wanda— haces.— suspiró mientras el seguía besando todo su cuerpo teniéndola en un frenesí.— Porqué se siente tan bien Stephen— gimió despacio de nuevo.

— Es un secreto. Pero se lo que hago, cariño.— Le respondió antes de plantarle un beso que la dejó sin aliento.

La tomó en brazos y entraron a la ducha tibia que combinada con sus cuerpos tan calientes empañaba todas las ventanas. Stephen iba a penetrarla cuando ella lo detuvo. Lo miró excitada y se arrodilló para lamer su miembro. La bruja se esforzó mucho para poder mantenerlo en su boca, pero tenía un tamaño bastante considerable. Mucho más que considerable. Aún asi la suave lengua que lamía de abajo hacia arriba, y sus pequeñas manos que ayudaban en el trabajo, llevaron al placer extremo a Stephen y acabó de eyacular en la boca de su novia. Ella nunca antes había hecho eso.

— Oh, lo siento. No pensé que...— dijo Wanda creyendo que sería un problema.

— ¡Ah! Ya me conoces Maximoff, sabes que no es ningún impedimento para seguir haciéndolo.— le dio un beso mientras la tomaba por el cuello y el agua caía sobre sus cuerpos.

Ella volvió a tocar su miembro y ya estaba totalmente erecto nuevamente. "Vaya, si que le sabe" pensó Wanda.

El la apoyó contra la pared de la ducha y la tomó en brazos mientras ella lo rodeaba con sus piernas resbalosas. Le dió un beso corto para poder ver su cara cuando entrara en ella. La bruja gimió con fuerza y automáticamente hubo una seguidilla de gemidos y suspiros incluso gritos, Strange siempre dio todo de si en el sexo con Wanda, pero esta vez parecía despiadado dejando sin respiración a la pobre bruja.

— Wanda, silencio. Hay gente abajo.

— Hazlo mas despacio entonces.

— No, ni loco.

— Ah esta bien yo no me callaré entonces— levantó una de sus manos y rodeo todo el lugar con una pared mágica aislante de todo sonido.— listo. Ahora sigue.—se mordió el labio suplicando.

Con la libertad de poder hacer todo el ruido que quisieran, siguieron comiéndose la boca bajo la ducha, mientras el la penetraba con todas sus fuerzas contra la pared.

Un calor se expandió desde la cabeza hacía cada célula del cuerpo de Wanda y llegó al mejor orgasmo de su vida, duró minutos. Desde ese momento no dejó de tener orgasmos, uno tras otro. Parecía interminable, Stephen se veía dispuesto a estar toda la noche ahí si era necesario.

—No puedo contigo bruja, estoy loco por ti.— la beso en el cuello y agarró uno de sus pechos antes de dejar todo su liquido dentro de ella.

Wanda se veía totalmente derrotada. Stephen le secó el cabello y la peinó, luego la llevó a la cama con sábanas suaves y le preparó té, que no tomó, porque se quedó instantáneamente dormida. El se acostó al lado con el torso desnudo, puso sus dos brazos tras su nuca mirando el techo y pensó "Uf, si, fue demasiado sexo"