Un Encuentro Inesperado

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~MARACAY-VENEZUELA 2018~ (RESUMEN)

~DAVID~

El ruido que había en el "MC CAFE", solo era comparable con el latido constante del centro de la ciudad de "MARACAY". Entre la multitud de mesas repletas de personas apuradas, conversaciones animadas,el aroma a café fresco y galletas recién hechas.

Decidí adentrarme a este local, sin saber que nuestros destinos estaban a punto de cruzarse, de la manera más inesperada. Me dispuse a sentarme en una mesa apartada, absorto de mi laptop, intentando concentrarme en mi trabajo de la preparatoria.

Mientras el murmullo constante amenazaba con distraerme. Cosa que no permitiría, a mis oídos llegaban fragmentos de conversaciones y risas, pero estaba decidido a terminar mi proyecto escolar a pesar de las distracciones, había quedado con Felipe y Maria para acabar el proyecto, eran mis mejores amigos desde la primaria, pero por lo que noté, no iban a llegar y como siempre tendría que resolverlo yo.

"Me hubiera quedado en casa" susurré para mí mismo con pesadez, hasta que algo llamo mi atención hacia la entrada del local.

En el otro extremo de la cafetería,estaba ingresando él, "RICARDO RAMIREZ", quien nunca pensé que se fijaría en mí, ingresó con paso seguro, y su mirada analizando el lugar en busca de un sitio vacío, tanta seguridad en una mirada hacia que me sintiera avergonzado.

Era un chico de más altura que yo, piel canela, ojos cafés en tono amarilloso, cabello negro y unos labios muy bien definidos, a decir verdad siempre lo he observado, desde hace ya un año, que se mudo a mi calle. Pero nunca hemos cruzado palabras, solo se su nombre por la correspondencia que dejan en el pórtico de su casa, por eso sé, que es dos años mayor que yo, osea que ya es mayor de edad, yo aún tengo 17.

El ruido de la campanilla en la barra de la cafetería, me saco de mi embobamiento y noté que el chico al no encontrar ningun lugar disponible, su mirada se posó en la mesa ocupada solo por mí.

Hizo una mueca de resignación.
"Pero,que se creé" pensé en voz baja indignado. se acercó y preguntó con cortesía y educación: —¿Puedo sentarme aquí?— cuestionó Ricardo.

levante la vista de mi pantalla con una ceja alzada, evaluando a Ricardo con un gesto de desaprobación antes de asentir con indiferencia.

—Adelante, no tengo ningún tipo de interés en ser amable hoy— respondí sin mirarlo directamente, "que malote soy" pensé triunfante para mí mismo.

Ricardo se sentó con una sonrisa irónica, por la forma supuse que estaba acostumbrado a los roces con desconocidos. —No te preocupes, no necesito tu amabilidad— Me replicó con sarcasmo mientras pedía un café al camarero, lo cual me dejó sorprendido.

A medida que pasaban los minutos, la tensión entre nosotros era palpable. Yo me sumergía cada vez más en mi proyecto, aunque no podia concentrarme en ello, debido a que me distraigo viendo de reojo al guapo chico en frente de mi.

Mientras que el ya mencionado hojeaba una revista con gesto distraído. Sin embargo, a pesar de sus intentos por ignorarme podía notar que me miraba, y una extraña atracción comenzaba a florecer en el aire cargado de la cafetería.

Fue un comentario sarcástico de Ricardo sobre la música que estaba sonando lo que finalmente rompió el hielo entre Nosotros. solté una risa sorprendido, encontrando un destello de humor en las palabras de mi compañero de mesa.

A partir de ese momento, la conversación fluyó con más facilidad entre nosotros, cada uno revelando un poco más de sí mismo entre bromas y comentarios ingeniosos, admito que el tipo tenía labia.

Te Encontré #PGP2024 [En Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora