[Capítulo N°21]

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Ángel.














Me sentía extraño. Pero feliz a la vez. Muy feliz, mejor dicho.

¡Besé a Dominic!

Mierda.

Es muy fuerte la emoción que estoy sintiendo en estos momentos.

Mi corazón late fuerte, tanto que casi puedo escucharlo.

Ella, hace unos instantes, dijo que me quería. ¡Me lo dijo mirándome a los ojos! Wah... Sentí mucho sus palabras.

Saltaría de la emoción... Pero me veré raro.

Después de que estuvimos abrazados, ella dijo que tenía que ir al baño así que nos separamos. Y desde que se fue, mi corazón empezó a acelerarse aún más.


Sus labios...

Su aroma...

Su tacto...

Es perfecta. Ella es perfecta.

Y ahora que lo pienso... Dominic es mi primer beso... Wah.

Me siento un poco tonto por no saber besar, pero mi corazón se siente feliz de que ella haya sido la primera.


Espero haber sido el primero para Dominic.







—¿Vamos? ¿Ángel? —la voz de Dom hizo que saliera de mis pensamientos, la miré y sonreí—. ¿Tenés todo lo que te mandaron a buscar?


—Ah —me levanté—, si, creo que si.


Caminé hasta la cocina y allí agarré todas las cosas que tenía que llevar. Las metí en la mochila que dijo papá y me las coloqué en el hombro. Volví hacia donde estaba Dominic, sonrió al verme.



—Listo —le dije, ella asintió y empezó a caminar. Pero antes de que saliera, agarré su brazo, deteniendola—. Espera...

—¿Qué pasa? —preguntó, acercándose. Me puse nervioso, tragué saliva.

—¿Ahora... qué pasará entre nosotros...? —me acerqué, con la mano izquierda coloqué un mechón de su pelo detrás de su oído—. Dijiste que los besos no son común entre amigos... Entonces, ¿En qué relaciones son comunes?

—Eh... —parecía nerviosa—, yo... Eh...

—Dom... —dije susurrando, me acerqué a su rostro, tomé valor y la besé. Ésta vez intentando tener un ligero movimiento, el cual seguramente salió torpe.

Ella intentaba seguirme el beso. Tomé su cara,  con ambas manos, y la seguí besando, despacio.


—Te quiero tanto... —se me escapó, cuando me separé unos centímetros para tomar un respiro. De pronto, ya no podía parar de besarla. Ella tampoco ponía resistencia, simplemente me seguía.

Resiliencia [En proceso/edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora