Capítulo 4

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Johana

Normalmente suelo despertarme temprano pero esta cama es tan cómoda que me cuesta mucho trabajo abrir los ojos. Valentina entró a mi habitación justo cuando me estába sentando en la cama.

La mañana del domingo fue bastante tranquila, nos dieron el dia libre y quería aprovechar para salir al jardín a tomar algunas fotos. Desayune y ya que vi que todos entraban y salian a su tiempo, decidí no terminar mi desayuno. Anoche no podía dormir de tanto que comí, me dolía el estomago y estaba segura que esta noche sería igual.

Me levante y salí del comedor, estaba a punto de salir al jardín cuando escuché mi nombre.

-Princesa Johana- dijo el Príncipe Taehyung y se acercó a mi -¿Podemos hablar un momento?
-Claro- dije y él estiro su mano hacia afuera para que continuaremos caminando -¿Qué sucede?
-Me gustaría ver tu trabajo
-¿Se refiere a mis fotos?- asintió
-No me hables tan formal. Me siento como un viejo.
-Lo siento. De hecho quería sacar algunas fotografías al jardín. Le pedí a mi Doncella que trajera mi cámara.- vi a Valentina y me acerque a ella. Tome la cámara y regrese con el Príncipe
-¿Qué podrías fotografiar aquí?
-Todo- sonreí -¿Puedo preguntarle por qué?
-¿Por qué me interesa tu trabajo?- asentí -Veras, como Príncipes no tenemos tantas libertades, pero no había tanto problema antes hasta que dieron a conocer nuestros rostros.- Me detuve y saqué una foto a una flor roja que jamás había visto. Se acercó a verla y abrió su boca asombrado -Tienes talento- aseguró emocionado
-Es solo una foto- dude y me detuve nuevamente - Aun no me dice para que quiere mis fotos.
-Hubo un tiempo en el que me dedique al modelaje, nadie sabía que era Príncipe, así que fue sencillo. Quiero seguir en eso pero con alguna identidad falsa. No sé, salir de espaldas o de perfil siempre, o tal vez que solo salga mi cuerpo.
-¿Y quiere que yo tome esas fotos?
-Háblame informal.- dijo exasperado -Si, bueno. Solo las de mi catalogo para poder enviarlo a algunas empresas y ver si me contratan.
-Bueno, puedo hacer eso.- que desperdicio, pensé. Taehyung era guapísimo y estoy segura que la cámara lo adoraba, creo que ser modelo era una habilidad nata. Lo que me daba aún más tristeza ya que al dejar de retratar su rostro perdería mucho valor la foto. Pero algo podíamos hacer.
-¿Cuando estaría bien?
-Puede ser el siguiente día que tengamos libre.
-Si, me parece bien. Bueno, entonces me voy.- Taehyung se despidió de mi con la mano y una sonrisa y se alejo.

El resto de la tarde, tomé algunas fotos y después subí a mi habitación. Nunca me había metido a una bañera. Así que creí que sería buena idea. Le pedí a Valentina que me ayudara a prepararla ya que sentía que echaría algo a perder.

Más tarde me arregle con un mono blanco, era de tirantes gruesos y tenia un escote un poco largo en la parte de enfrente, las piernas eran anchas y la cintura se me ajustaba demasiado. Elegi dejar de verme en el espejo cada que me pusiera ropa nueva, que al parecer sería diario. La chica del reflejo, que claramente no era yo, no se iria por mucho tiempo y no tenia ánimos de verla tan seguido.

Baje a cenar y la mayoría de las Princesas y de los Príncipes ya estaban ahí. Repase la mesa mientras me acercaba a mi lugar y mis ojos se encontraron por un momento con el Príncipe Desagradable, solo que ahora ocupaba uno de los asientos casi al final de la mesa. Se que es una grosería pero a comparación de el resto de las chicas del Reino, mientras ellas se volvían locas con las solicitudes para el concurso y cuando dieron a conocer los rostros de los Príncipes, la verdad es que a mi no me importaba. No puse atención y ahora no reconozco a nadie, a excepción de Taehyung que es el único que me ha hablado. Debo pensar seriamente en preguntarle a Valentina o pasaré una vergüenza.

El Príncipe rubio que se sentó a mi lado me sonrió amable pero claramente no tenía interés en mi. Lo descubrí observando detenidamente a la Princesa al otro lado de la mesa. Sonrei al ver que ella volteaba de reojo y el no parecia darse cuenta. Hacen una hermosa pareja.

El Diario Real: Princesa JohanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora