El Diario Real: Princesa Johana

Capítulo 11

Johana

Creí que ya no estaba en peligro de entrar en depresión, pero al parecer estaba equivocada. Estos últimos días, llorar por horas es lo único que me ayuda a dormir y para nada hablo de un sueño profundo, hablo de perder fuerzas y quedarme dormida por el cansancio y lo débil que me siento, pero mi cerebro sigue trabajando a mil, pensando en como mi vida es una basura y cada vez me sumerjo más en ella.

No se como logro mantenerme en pie y sin llorar durante las hora que tengo que estar en clase o en el comedor. La única que sabe de esto es Valentina y ella es una maga con el maquillaje, tanto que mis ojeras y el surco de mis ojos hundidos ni siquiera se notan. Aún no hemos podido hacer nada al respecto con los kilos que he perdido recientemente.

Esta mañana creí que el viaje serviría para distraerme, pero al ver a mi padre en el restaurante, mi mundo se vino abajo. Ya no tengo más fuerzas pero aún así me levante para llevármelo de ahí. Tenia miedo de voltear y toparme con los ojos de Yoongi, estaba tan avergonzada que quería huir de ahi. Si hubo alguna posibilidad de que el sintiera algo por mi, con esto seguramente, se esfumó.

Intentaba llevarme a mi padre aunque se como es y sabía que no sería sencillo, me estaba arriesgando a que al salir de aquí me golpeara por arruinar sus planes pero no mw importaba. Me propuse salir des restaurante con el y no regresar. En uno de los movimientos en que lo tome del brazo y él se libero de mi agarre, terminé en el suelo. Cinco segundos después, las manos de Yoongi me estaban levantando y le hacían saber a mi padre que no recibiría nada del Palacio. Lo escuché decir que se casaría conmigo si era necesario. Ojalá lo hubiera dicho porque de verdad quería hacerlo.  Baje la cabeza y el Príncipe me sacó jalando del lugar, me llevó a uno de los autos y nos soltamos.

Siento que mi cuerpo actúa de manera automática. Yoongi me trajo a su habitación en el hotel y quiere que me quede aquí, trato de poner la mayor distancia posible, lo que para el es un juego a mi me parte el corazón. Estoy bastante mareada con toda esta situación y después de que él intentará besarme lo empeoró. Sentir sus labios contra los míos, me provocaron una descarga en todo en cuerpo.

-Por favor- suplique. Lo extrañaba, lo necesitaba pero mi cuerpo no estaba funcionando -Por favor, Yoongi.
-¿Por favor qué, nena?
-Por favor deja de jugar conmigo. Ya no lo resisto.- empecé a llorar, no podía más con esto -Mi corazón ya no resiste con tanta tristeza. Me estoy rindiendo.- no supe en que momento me sostuve de sus brazos, pero ya no me estaban sirviendo para mantener el equilibrio. Un zumbido en mi oído se hizo cada vez más fuerte y con el una nube negra que no me permitía ver.  De repente mi cuerpo se debilitó y no supe más de mi.

Desperté desconcertada, no sabía dónde estaba hasta y tenía la sensación de que mi cuerpo no era mío, era como si estuviera entumecido. Poco a poco empece a sentir y mis sentidos se fueron activando, lo primero que note fue el brazo que envolvia mi cintura. Me gire despacio hasta quedar frente a el, su boca estaba levemente abierta y su respiracion era pesada. Yoongi estaba profundamente dormido con uno de sus brazos debajo de mi cabeza y el otro aun rodeando mi cintura. No quise despertarlo, quería admirarlo un rato más, esta es la última vez que dormiremos juntos y quiero disfrutarlo. Sus facciones son hermosas, subí una mano despacio y quite un mechon de cabello de su frente, ahora su cabello había crecido y para ser honesta se veía guapísimo. Baje mis dedos por su mejilla y acaricie suavemente su rostro, luego sus labios, mientras mi dedo índice recorría su labio, Yoongi dio in beso en el y yo me espante. No se cuanto tiempo llevaba despierto.

-¿Te gusta lo que ves?
-Lo siento, no quise des...
-A mi si- dijo y volvió a cerrar los ojos -es temprano, hagamos que esto dure un poco más
-¿A que te refieres?
-Duerme- abrió los ojos y los fijo en los míos -mañana tenemos cosas que hacer -volvió a cerrarlos -es la primera noche de esta semana que duermo
-Yo también- cerré los ojos y me acomode en sus brazos, de repente sentí sus labios en los míos. Fue rápido y tierno. Definitivamente algo que no sucedería otra vez.