Capítulo 14

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Yoongi

Nunca había dormido tan a gusto como hoy. Puede ser el cansancio por la sesión de buen... excelente sexo del día de hoy o simplemente porque ella esta aquí conmigo. Sigo pensando en el momento que me dijo que me amaba. Sabía que tendría que esperar para eso, se lo herida y temerosa que esta de que alguien lastime su corazón, pero ese no seré yo.

Estaba profundamente dormido cuando mi celular sono, era un texto pero era demasiado tarde lo cual indicaba que era una emergencia. Note que Johana se sentaba en la cama a verme mientras hablaba por teléfono. El texto decía que el Palacio había sido invadido pero no habia más información. Marque a Nam para que me explicara mientras me vestía y le daba a Johana cosas para que se vistiera cómodamente. Necesita dejar ropa aquí, pensé mientras Nam me respondía.

Intentaba que mi mente creara un buen plan pero no podia dejar de pensar en que Johana corría peligro, necesitaba llegar a una habitación de seguridad y dejarla ahí. Hasta ahora es el único plan que suena bien. Después de que los chicos nos avisaran que había gente infiltrada decidí que ya no perdería más tiempo. Lleve a Johana a un lugar seguro y me despedí de ella. Espere que se cerraran las puerta y fui en busca de Tae.

Mi hermano iba entrando casi al mismo tiempo.

-¿Qué sabes?- pregunté
-Al parecer no son tantos, creo que pensaron que nos agarrarian desprevenidos pero Jimin y Amalie pusieron a salvo a mis tíos.
-Bien- dije y buscamos reunirnos con el líder de los soldados.
-Príncipes- dijo al vernos e hizo una reverencia -Recibimos un mensaje del Príncipe Namjoon, los infiltrados se identifican con un listón blanco en la mano
-Idiotas- dije con una sonrisa.
-¿Tienes identificados entre tus tropas?-Pregunto Tae.
-Hay tres señor
-Bien, cada uno de nosotros llevará a una tropa hacia una de las entradas a esa ala. Hay que acorralados.
-Si señor. Dividire a los identificados en cada una de las tropas así serán diez contra uno.
-Una vez que estén en posición, capturen al infiltrado así no correremos riesgos- dijo Tae.
-Si, señor.

Trazamos algunos planos para poder rodear a los invasores, ahora sabemos que no son tantos y que tienen desventaja porque no pensaron que supiéramos de ellos tan rápido. Nuestro capitán de los guardias ya había informado a la policía quienes venían en camino.

-Señor, todo está listo- se acercó uno de los guardias a quien reconocí enseguida. El Duque que bailo con Johana en la fiesta de recaudación.  Sonrei y me tape la boca, no podía esperar para restregarle en la cara que ella era mía.

Los guardias se pusieron en acción y en menos de veinte minutos ya tenían todo bajo control. Bajamos a la sala de estar junto con los Reyes y las Princesas que ya habían salido de los cuartos de seguridad. Estábamos esperando a que el capitán y el Duque nos dieran un reporte de lo que había sucedido.

-Su alteza- dijo el Duque haciendo una reverencia mientras entraba al gran salón. Añadió otra reverencia hacia la Reina y luego algunas pequeñas reverencias más saludando al resto de las personas en el lugar. Mientras el capitán llegaba, todos estábamos platicando en pequeños grupos. Johana se había quedado con su doncella y yo estaba hablando con mi tío, Namjoon y Tae. Vi de reojo que el Duque se acercó a ella e hizo una reverencia demasiado formal. Ella le gustaba y yo quería asesinarlo con mis propias manos.

-Disculpen, ya regreso- hice una reverencia y me gire lentamente hacia ellos. Mientras más me acercaba más podía escuchar sus palabras.
-Me alegra que se encuentre bien y que haya encontrado el cuarto de seguridad rápidamente.
-Nena, aquí estas- dije mientras rodeaba su cintura con mi brazo. -Debes dejar ropa en mi habitacion- dije jalando un poco la sudadera que llevaba puesta.-Mi ropa te queda un poco grande- me rei y ella agacho la mirada observando su pantalón
-Me veo más pequeña- se río y sentí celos de que él pudiera escuchar esa melodía que era solo mía.
-Oh, Duque.- salude con una sonrisa burlona. -¿Necesita algo?- levante una ceja
-Principe- me saludo formal -No, solo le preguntaba a la Princesa si se encontraba bien
-Tal vez debería preguntarle eso a la que esta siendo atendida- dije señalando a Becca con la cabeza y con cara de fastidio. -Vamos nena, debes estar cansada- puse un brazo sobre sus hombros y la lleve a un sofá.

El Diario Real: Princesa JohanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora