Intruso entrometido

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Apoyado contra el respaldo de la cómoda silla contemplo como la peliblanca juguetea con sus manos un tanto nerviosa. Esta esperando que la regañe, sin embargo eso no va a suceder. Es bueno ver que aún quedan diminutos vestigios de su otra vida, como ese gesto de ella al verse en una situación estresante o incómoda.

Libero una carga de aire pesada fuera de mi boca, que recuerdos me trae esta escena.

Tantas veces que la regañaba, que nostalgia.

Cambio a mi forma slime y lo suelto sin medir las palabras.

Te daré un nombre. - su cara por si sola dice miles de maravillas, sonrio metalmente, pues estoy bastante seguro que empezaba a querer matar a las personas cuando se dirían a ella con aspectos referentes a su cuerpo.

Es tan transparente que puedo leerla con facilidad, aunque ahora me cuesta más trabajo saber que piensa.

Ashina -  Formulo de manera susurrante, sin embargo mi tono bajo llega hasta su posición. Su sonrisa se amplia, cerrando sus ojos amarillos en el proceso.

Mis magicules caen drásticamente, mientras la recién nombrada chica de cabello blanco tambalea y cae al piso hasta perder la consciencia.

No pensé que tomará tanta magicules, un poco más y me quedo sin ninguna.

Pero no me espere que un aura verde apareciera de la nada. Adquirí mi forma humana y me coloque delante del cuerpo desmayado de mi hermana, protegiendola.

Una sospechosa dryade apareció en mi visión, aspecto angelical, buen cuerpo y cabellos verdes, sus ojos llaman mucho la atención pues son rojos. Una belleza incalculable, pero su aura me da asco.

Detectada presencia corrompida, tomando contramedidas

La observo mirar sobre mi hombro, admirando a la insconciente muchacha detrás de mi.

Así que ya está hecho, maravilloso. - Lleva su mano hasta su cara alzando el mentón, cubriendo un ojo y dejando libre el otro, brilla con perversidad - Ella se convertirá en una pieza clave para nuestro juego perverso.  -  Sonrie con malicia, frunzo el ceño.

Maldita sea, desde cuando las dryades son tan malvadas.

¿Que es lo que quieres?  - Respondo de manera pasiva y agresiva. Se meten con lo que más quiero, recibirán su castigo. Preparo la contramedida de Great Sage, aunque con mis magicules casi al mínimo esto tardará un poco.

¿Yo?  Yo no quiero nada  -  Rie maniaticamente, extirando sus brazos a los costados. - Mi amo es el que decide, yo solo soy una humilde sirvienta bajo su mando y él decidió tenerla a ella.  - Avanza hasta mi, luciendo altanera.

Ranga

Aun necesito tiempo, la barrera que colocó a nuestro alrededor cuando llegó, absorbe el sonido. Es decir que nadie sabe lo que está pasando aquí dentro, pero deben estar atentos dado de que la barrera no es para nada modesta. Su color naranja con fucsia es una prueba de ello.

El lobo con una estrella en su frente aparece desde mi sombra y muy enfurecido, aulla contra la intrusa. Lanzandole una mortal mordida más su habilidad intimidación, pero la mujer no se inmuta y esquiva de manera ágil el ataque del que posee cola. Luego ella con un salto termina encima de Ranga, mientras, veo como el lobo intenta quitarsela de arriba lanzandole mordiscos. Cansado se tira al suelo, aplastandola con su peso.

Ranga alejate - ordeno y el de pelo áspero se retira, dejando vía libre para mi habilidad Gluttony, pienso absorberla pero no la dejaré estar en mi estómago, se convertirá en magicules. Su odiosa actitud le hizo ganarse eso.

Otra Vida, Otro Nombre... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora