After Story

14

Habían pasado varios días, no más de una semana. El lobo había sido paciente y esperó al chico de la caperuza, se alegró al verlo en el camino del bosque otra vez, caminaba con lentitud, tal vez aún le dolía la herida de la pierna y por eso no la afincaba mucho. Corrió hacia él para recibirlo con un abrazo.

-¡Lobito! –Dijo con un tono de voz alegre, sintiendo algo de ternura mientras correspondía al abrazo.- Aw, ¿Me extrañaste?

- ... Sí. –Sintió como su cabeza era acariciada.- ¿Cómo está tu pierna?

-No duele mucho, ya puedo caminar bien.

Ambos fueron a sentarse en el lugar de siempre, Rosmer revisó su cesta y sacaba algunas cuantas flores y empezaba a tejerlas entre ellas. Ale estaba recostado del árbol, abrazando a Rosmer por detrás que estaba recostado en él.

-Casi me castigan en casa... Fue por mi imprudencia, quizá si no hubiera corrido y hubiera sido más precavido al caminar por las hojas... Y también me hubiera ahorrado unos cuantos regaños si el leñador no me hubiera encontrado en lo profundo del bosque. Tuve que decir que era un exagerado, jaja.

-Si hubiera corrido yo primero, tú no habrías pisado el cepo. –Dijo sin pensarlo mucho.

-Hubiera sido peor... Te hubieran matado.

-Ah, sí es verdad.

-Me siento alegre de haber hecho trampa al jugar.

-Hm...

-¡Terminé! –Dijo mientras levantaba una corona de flores que acababa de hacer, se volteó para estar en frente de Ale y se la puso en la cabeza.- ¡Se te ve bien!

"Creo que me veo ridículo..." luego iría a ver su reflejo en el río, no se quitaría la corona ahora porque no quería hacer sentir mal a Rosmer.

Sintió los labios del chico de la caperuza sobre los suyos, correspondió al beso, que esta vez fue más largo que los anteriores. Después de terminarlo, volvieron a abrazarse, Ale estaba dispuesto a durar el tiempo que fuera en ese abrazo, ambos empezaban a sentir algo de melancolía les daba algo de temor pensar en lo que pueda pasar en el futuro, pero bueno, mejor disfrutarían el presente mientras se pueda. A los minutos Rosmer se levantó.

-¿Qué tal sí... -Recogió una rama grande del suelo.-...Desactivamos cepos?~ No quiero que a alguien más le pase lo que a mí.

-Bueno... Está bien.

-Yay~

-¡No corras! –Exclamó al ver a Rosmer alejarse.