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El silencio era palpable en estos momentos. Ambos adultos, llámense Jungkook y Jung-soo, se mataban con la mirada al querer ambos saber quien tenia el mando en esa situación. Yulia seguía sin decir nada, mirando a sus padres y con temor de que algo llegara a pasar. Ella sabia acerca del odio que se tenían su papá y su ¨tío¨, era tan grande el odio que Jungkook no soportaba verlo ni en pintura y si lo tenia en frente tendría siempre su cara de desagrado hacia él.

Jk: lamento informarte que Yulia no se podrá ir contigo hoy. -decía con la mirada llena de odio.

Js: ¿por que? Es un acuerdo, no puedes hacer eso. -se defendía aunque fuera innecesario.

Jk: soy su papá y si se me da la gana puedo hacer que no te vea en lo que resta del año. -sus palabras salieron como si fueran dagas hacia el chico en frente.

Js: Yulia. -llamo a su hija- ¿tú...quieres venir conmigo? Te llevare al cine. -intento convencerla.

El pelinegro rio seco al escuchar lo dicho por Jung-soo. La pelinegra bajo la mirado pensando en si decirlo o no, puede que no considere a ese hombre como su padre, pero le importaba lo que pensaba aunque fuera estúpido, ya que él solo la busca los días que le toca llevársela, que son muy pocos.

Yl: yo, la verdad...-hizo una pausa. Sus padres la miraron- hace mucho no voy a casa de tae y...quiero ver a minmin, así que...-levanto la mirada- no es por ofenderte ni nada, pero...no quiero ir contigo. Quiero ver a tae y a minmin. -fue su respuesta ante Jung-soo. Jungkook volteo en dirección a él al mismo tiempo que Jimin y luego suspiro rendido y cansado de la misma situación.

Jk: ya la escuchaste. -pronuncio- no quiere estar hoy contigo. Ven otro día. -lo corrió con ganas.

Js: esta bien...-dijo mirando al suelo- nos vemos mas tarde. -giro sobre sus talones y empezó a caminar lejos de esa casa.

Jm: ¡Adios! -grito Jimin hacia su hermano.

La pequeña familia se adentro poco después a su hogar. No les sorprendía la actitud de Jung-soo a ambos adultos, era normal que el siempre quisiera obtenerlo todo. Jimin como hermano mayor ya estaba costumbrado, aunque le molestara un poco y le haya afectado en su niñez. Cada vez que tenia la necesidad el castaño siempre rogaba por algo que quería y pues, la señora Park, digamos que...era una mujer que consentía a sus hijos a mas no poder. Solo que uno si aprendió que no todo lo que quieres en la vida lo obtienes mientras que el otro siguió de largo.

Después de que Yulia terminara de empacar su pequeña mochila para irse por una noche a la casa de sus tíos; Jungkook se ofreció en llevarla y esta acepto. Ya estaba acostumbrada a que su papá la llevara a ciertos lugares.

Al llegar se despidió del pelinegro con un abrazo y un ¨hasta mañana¨ luego se adentro a la casa y empezó a jugar con su hermanito. Era lo único que la hacia sentir en su hogar; estar con su hermano era la mejor medicina que podia tener.

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Había pasado un rato después de que yulia se había ido y ambos adultos se encontraban preparando la cena para después irse a dormir. El día de hoy fue un poco fuerte gracias al accidente, y es que ¿Cómo no? Te acaban de atropellar, dos veces, y tú aun no sabes quien demonios es el que te quiere hacer daño. Es como buscar una aguja en un pajar y lastimarte con todas las demás que están allí. Urgentemente tenían que hablar Tzuyu y preguntar a ver si podia averiguar, aunque sea, la placa del auto gracias a las cámaras de vigilancia de los semáforos.

Jm: ¿que esta pasando? -dijo Jimin pensativo.

Jk: ¿a que te refieres? -devolvió la pregunta.

Jm: a que...-hizo una pausa- Jennie esta muerta y dudo mucho que Jung-soo siga sus pasos, no está tan loco como para hacerlo. -miro su plato- digo... ¿Quién nos quiere hacer tanto daño que es capaz de hasta querer matarme? -miro a Jungkook.

Un Nuevo regalo Inesperado (completa) ~•kookmin•~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora