NUEVA VIDA

57 8 1
                                    

NARRA EMILY:

Mi corazón salto sobre mi pecho cuando mi padre entro, sabía lo que el pensaba sobre las personas como yo y también sabía que él era capaz de sacarme de la casa por esto.

-¡Emily Hailee Franklin que rayos crees que estás haciendo!-grito con aún más exasperación que antes.

-Pa..pá...¿Que haces en mi cuarto?-dije muy asustada y moviendo a Kiernan de mi regazo.

-¡Vine temprano a la casa y quería saludarte y me encuentro con esto!, ¡En mi propia casa!; ¿Que rayos pasa contigo?-dijo entre gritos mientras le daba golpes al marco de mi puerta.

-Es mi culpa señor- se apresuró en decir Kiernan.

-Tu...tu...sal de mi casa ¡Ahora!- le gritó mientras ella solo fue corriendo pidiendo disculpas.

-¡Papá no tienes derecho a hacer eso!, No estábamos haciendo nada malo.

-¿Qué no estaban?, ¡No te das cuenta de la gravedad del asunto Emily!

-¡No!, No lo hago y ¿Sabes por qué?.. porque no estábamos haciendo nada grave, solo fue un beso, ya tengo edad para poder decidir si quiero estar con alguien o no...o si...o si...quisiera llegar a enamorarme.

-¡Pero de un hombre!, ¡Hombre!, Esto es pecado Emily.

-Si, pero...¿Qué tal si no lo es? Ahhh...¿Te pusiste a pensar en eso?...¿Que tal si...?, ¿Que tal si...? ¿El que está equivocado eres tú y no yo ah?

-¡No te atrevas a responderme Emily! Soy tu padre.- me respondió acercándose de una manera muy agresiva hacia mi.

-¡Entonces actúa como tal!, Siempre me juzgas, insultas, me gritas y me golpeas, nunca me preguntas como me fue en clases o...si me gustaba alguien...o ¡Algo sobre mi maldita vida!-le dije mientras las lágrimas caían de mis ojos como si fuesen cascadas.

-No te atrevas a hacerte la víctima ahora, nosotros te hemos dado todo, ¡Nunca en tu maldita vida te ha faltado nada! ¡¡¡COMO PARA QUE ME VENGAS A DECIR QUE NO ACTUO COMO UN PADRE MALDITA SEA!!!- dijo mucho más alterado que antes y dándome un fuerte golpe en el rostro, el cual por alguna razón me recordó a mi anterior vida cuando igual me habían golpeado.

-Un verdadero padre no lastimaria a su hija por el simple hecho de querer a alguien- le dije desde el suelo aún llorando.

-¿Querer?, ¿Querer?-dijo dando gritos al aire-¡Tu no sabes lo que es querer Emily!

-¡Claro que lo sé!, Incluso mejor que tú-me volvió a dar otro golpe aún con fuerza que el anterior, el cual me llegó a sacar sangre.

-Eso te dejará de lección a aprender a seguir la palabra del señor, y que no te vuelvas a desviar por el camino de Lucifer-se empezó a alejar.

-¿Camino?, Es que aún no logro comprender ¿en que clase de Dios es el que tú crees papá?, yo creo que sí alguien va saber lo que está bien y lo que no, es el y no tu; el señor también dijo que no juzgararamós y lo primero que tú haces es hacer un juicio a priori, su palabra habla del amor a la familia y tú solo sabes gritar y golpear y te excusas en su palabra, no eres un seguidor devoto, lo que eres, es un cobarde y te da miedo el admitirlo- hablé llena de valor y a la vez temor, sin saber cómo reaccionaria ante mis palabras.

La DecisiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora