McDonald's Restaurant

𝟶𝟶𝟷

¡Hora de comenzar a trabajar y deja de dormirte Luffy!

Eran las seis de la mañana en ese Mcdonalds, Nami al levantar su mirada se encontró con su amigo de sombrero de paja dormido sobre la puerta, se río por lo dormilón que podía ser Luffy, acercándose con cuidado para despertarlo.

Luffy al sentir una mano sobre su sombrero levanto la mirada sorprendiendo a la chica que lo miraba, ganándose un regaño por su parte.

—¡Pensé que estabas dormido! Por Dios.

—¡Buenos días Nami! –saludo Luffy con una gran sonrisa, parándose de dónde estaba.

—Buenos días Luffy.

Los dos se pudieron hablar, mientras llegaban sus demás amigos, la siguiente en llegar fue Robin viniendo con un gran termo lleno de jugó, dándole a Luffy y Nami y guardando un poco para los demás, saludando a Luffy como Capitán y a Nami como navegante, desde que Luffy vio esa películas de piratas quedó encantado con ser llamado capitán, la azabache no le molestaba para nada llamarlo así, y el apodo de Nami más que nada por qué siempre comentaba que le gustaría estudiar Cartografía.

La siguiente en llegar fue Kaya, saludando a los tres con una hermosa sonrisa, haciendo conversación con Nami mientras que Robin escuchaba atentamente a Luffy sobre aventuras piratas imaginarias.

—Luffy, dudo que en algún momento existan esas frutas. –dijo Robin con una sonrisa, lo que hizo que el azabache se enojara un poco.

—¡Lo sé Robin! Pero te imaginas las cosas locas que podrías hacer! Estirar tus brazos, ser de fuego, de arena! Cambiar de forma! Sería muy divertido, no crees?

La risa de Robin sonó nuevamente, pero está vez dándole la afirmación.

El último en llegar fue Chopper junto con el gerente, los cuatro dejaron de hablar, presentando sus más formales saludos al hombre que tenían al frente, abriendo el local, cada uno se fue a los vestidores, para salir con su respectivo uniforme, haciendo una fila esperando las órdenes del gerente del día.

—Nami como siempre darás las órdenes del día, intenten vender los combos familiares y recuerden cerrar a las 11; Luffy ten cuidado con la freidora que ya te llevas quemando muchas veces y por último, cuídense.

Los cinco aceptaron las palabras del hombre antes de decir un "Si señor" para luego ver cómo esté se iba dejándolos solos, al momento que vieron que tomaba un taxi soltaron un gran suspiro. Aunque era amable a su manera su mirada era una muy seria y penetrante.

Dando un aplauso todos prestaron atención a la pelinaranja.

—¡Muy bien! Tenemos una hora y media para abrir esto, Luffy y Chopper limpiaran las mesas y pisos. –dijo con mucha determinación.

—¡Vale! –dijeron ambos haciendo la señal de un soldado antes de irse al cuarto de limpieza.

—Robin tu harás el inventario, Kaya tu sacarás la basura y la basura extra que te den los idiotas, yo haré las cuentas de la noche anterior.

—Me aparece bien Nami san, a vos siempre se te ha dado bien las cuentas. –dijo Kaya.

Sin demorarse más, nada uno comenzó hacer sus quehaceres, Luffy y Chopper limpiaban como si fuera un juego pero a final de cuentas estaban limpiando muy bien, Robin en el almacén anotaba y escribía todo en un cuaderno, Kaya iba baño por baño echando la basura a una bolsa y Nami en un cuaderno anotaba y multiplicaba las ganancias y propinas.

Eran las 7:46 cuando terminaron todo, poniendo a trabajar la cocina para tener un poco adelantado los desayunos, los cinco se sentaron en una mesa, Luffy estaba que se dormía mientras los demás hablaban.