¡Buenos Días, Princesa! #1

Capítulo 43

•|9 de julio de 2021, Londres, Inglaterra|•

Abro la puerta de mi pequeña casa y anuncio mi llegada alegremente, pero no recibo respuesta. Éste hombre... Seguro que está jugando a algún videojuego tonto. Llevo días fuera y ni se ha enterado de que he vuelto.

Me adentro en la casa, y me dirijo directamente a su cuarto de juegos, donde me lo encuentro jugando a War Zone o algo así. La verdad es que los únicos videojuegos que conozco son de MotoGP o de F1, el resto ni idea.

- Si lo llego a saber me quedo en España - digo en español lo suficientemente alto como para que él me escuche.

Gira su cabeza y sonríe ampliamente al verme, pausando el vídeojuego para levantarse y venir a saludarme.

- No te he escuchado - se excusa, respondiendo en su pésimo pero adorable español.

- Hola, Flash - susurro cuando me abraza. Yo rodeo su cuello con mis brazos y beso su mejilla.

- Hola, Princesa - responde besando mi pelo, que de nuevo lo llevo muy corto. - ¿Qué tal España? - Inquiere mientras salimos de la habitación para ir al salón, donde nos acomodamos en el sofá, juntos, para poder hablar tranquilamente.

- Pues... Las chicas están bastante sanas y felices, no me quejo - respondo sonriendo. - Y bueno, mi pandilla se ha encargado de que el único día que estuve en Córdoba fuese el mejor día de toda la gira.

- Me hace gracia que llames gira a tu firma de libros. Parece que eres una cantante o una buena escritora de verdad - se burla, ganándose un golpe en el pecho.

- Eres un idiota... Se vendieron 200.000 ejemplares en sólo una semana, y eso que mi nombre aún era anónimo - le recuerdo con orgullo.

- Siempre me lo dices...

- Porque siempre te ríes de mí - replico frunciendo el ceño infantilmente.

Él se ríe y besa mis labios, haciendo que se me olvide todo. Me relajo y le sigo el beso, feliz y a gusto de estar con él de nuevo. Ojalá hubiese podido acompañarme a España, pero no todo se puede.

- ¿Eric te trajo los apuntes? - Pregunto interrumpiendo el beso.

- Sí, los trajo hace una hora o así - responde rodando los ojos. - Dice que no te has perdido nada de interés.

- A él nada le parece interesante - digo riendo. - ¿Tú cómo has estado estos días? - Inquiero acariciando su mejilla.

Él me sube a su regazo y yo me quedo ahí sentada felizmente, esperando su respuesta. Nos hemos llamado todos los días, pero aún así nos gusta contarnos nuestras tonterías cuando volvemos a vernos. Yo he podido acompañarle a sus carreras más a menudo, pero también he empezado a viajar mucho más a España. El tiempo que pasamos juntos es muy valioso, y nos gusta darle importancia a pequeñas cosas como contarnos que un idiota se saltó un semáforo en rojo o un amigo nos invitó a salir. Cosas sin importancia al fin y al cabo, pero que nosotros nos contamos.

- Bueno, principalmente me he aburrido y te he echado de menos - dice haciendo un puchero realmente adorable. - Pero también he... Estudiaro español - balbucea en mi idioma natal y yo me río.

- Estudiado - le corrijo sonriendo. - Me alegra que te vaya tan bien con ese profe - comento.

- Como la señorita no tenía tiempo para mí - murmura con falso enfado.